domingo, 14 de noviembre de 2010
Sueños RET - SED
Retraso:-Llegar con retraso a la estación y perder el tren significa que por nuestra culpa en la vida real estamos perdiendo oportunidades de mejorar.
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sábado, 13 de noviembre de 2010
7.- EL DESTRONAMIENTO DE CRONO
Robert Graves: "Los mitos griegos"
Traductor:Luis Echávarri, revisión: Lucía Graves
a. Crono se casó con su hermana Rea, a quien está consagrado el roble[1]. Pero la Madre Tierra y su moribundo padre Urano profetizaron que uno de sus hijos lo destronaría. En consecuencia, cada año devoraba a los hijos que le daba Rea: primeramente a Hestia, luego a Deméter y Hera, y más tarde a Hades y Posidón[2].
b. Rea estaba furiosa. Dio a luz a Zeus, su tercer hijo, en plena noche en el monte Liqueo de Arcadia, donde ninguna criatura proyecta su sombra[3] y, después de bañarlo en el río Neda, lo entregó a la Madre Tierra, quien lo llevó a Licto en Creta y lo ocultó en la cueva de Dicte en el monte Egeo. La Madre Tierra lo dejó allí para que lo criaran Adrastea, una ninfa del Fresno, su hermana Io, hijas ambas de Meliseo, y la ninfa-cabra Amaltea. Se alimentaba de miel y bebía la leche de Amaltea, con el chivo Pan, su hermano adoptivo. Zeus estaba agradecido a las tres ninfas por su bondad y cuando llegó a ser el Señor del Universo puso la imagen de Amaltea entre las estrellas, como Capricornio[4] y También tomó uno de sus cuernos, que parecía el de una vaca, y se lo dio a las hijas de Meliseo; se convirtió en la famosa Cornucopia, o cuerno de la abundancia, que está siempre lleno de todos los alimentos o bebidas que su poseedor pueda desear. Pero algunos dicen que Zeus fue amamantado por una cerda y cabalgaba montado en su lomo, y que perdió su cordón umbilical en Onfalión, cerca de Cnosos[5].
c. Alrededor de la cuna dorada del niño Zeus, la cual colgaba de un árbol (para que Cronos no lo pudiera encontrar ni en el cielo, ni en la tierra, ni en el mar) se hallaban los Cúreles armados, hijos de Rea. Golpeaban sus lanzas contra los escudos y gritaban para ahogar el llanto del niño, por temor a que Crono pudiera oírlo desde lejos. Rea había envuelto una piedra en pañales y la había entregado a Crono en el monte Taumacio de Arcadia y él la había devorado, creyendo que devoraba al niño Zeus. Sin embargo, Crono descubrió lo que había sucedido y persiguió a Zeus, quien se transformó a sí mismo en una serpiente y a sus nodrizas en osos: de aquí las constelaciones de la Serpiente y las Osas[6].
d. Zeus llegó a la virilidad entre los pastores del Ida, ocupando otra cueva; luego buscó por todos lados a Metis y la Titánide, quien vivía junto a la corriente del Océano. Por consejo de ella visitó a su madre Rea y le pidió que le nombrara copero de Crono. Rea le ayudó de buena gana en su venganza; le proporcionó la pócima emética que Metis le había encargado mezclar con la bebida dulce de Crono. Cuando Crono hubo bebido en abundancia vomitó primeramente la piedra y luego a los hermanos y hermanas mayores de Zeus. Salieron ilesos y, en agradecimiento, le pidieron que los encabezara en una guerra contra los Titanes, quienes eligieron al gigante Atlante como jefe, pues Crono había pasado ya de la flor de la vida[7].
e. La guerra duró diez años, pero al final la Madre Tierra profetizó la victoria para su nieto Zeus si éste tomaba como aliados a aquellos a quienes Crono había confinado en el Tártaro; en consecuencia, se acercó secretamente a Campe, la vieja carcelera del Tártaro, la mató, le quitó las llaves y después de poner en libertad a los Cíclopes y a los gigantes de las cien manos, los fortaleció con comida y bebida divinas. En consecuencia los Cíclopes le dieron a Zeus el rayo como arma ofensiva, a Hades un yelmo que la hacía invisible, y a Posidón un tridente. Después de celebrar los tres hermanos un consejo de guerra. Hades se presentó invisible ante Crono para robarle sus armas; y mientras Posidón le amenazaba con el tridente, desviando de este modo su atención, Zeus lo derribó con el rayo. Los tres gigantes de las cien manos alzaron rocas y las arrojaron contra los demás Titanes y un grito súbito de la Cabra-Pan los puso en fuga. Los dioses los persiguieron. Crono y todos los Titanes vencidos, excepto Atlante, fueron desterrados a una isla británica del lejano oeste (o, según algunos, confinados en el Tártaro), bajo la guardia de los gigantes de las cien manos. No volvieron a perturbar la Hélade. A Atlante pese a ser su jefe de guerra, se le impuso un castigo ejemplar, ordenándole sostener el firmamento sobre sus espaldas; pero se perdonó a las Titánides, en atención a Metis y Rea[8].
f. Zeus mismo instaló en Belfos la piedra que había vomitado Crono. Está todavía allí, se la unta constantemente con aceite y se ofrecen sobre ella hebras de lana destejida[9].
g. Algunos dicen que Posidón no fue devorado ni vomitado, sino que Rea dio a Crono en lugar de él un potro, y lo ocultó entre las manadas de caballos[10]. Y los cretenses, que son mentirosos, refieren que Zeus nace cada año en la misma cueva con un fuego centelleante y un chorro de sangre, y que cada año muere y lo en-tierran[11].
*
1. Rea, igualada con Crono como Titánide del séptimo día, puede ser igualada con Dione, o Diana, la triple diosa del culto de la paloma y el roble (véase 11.2). La podadera que llevaba Saturno, el equivalente latino de Crono. tenía la forma de pico de cuervo y al parecer se utilizaba en el séptimo mes del año sagrado de trece meses para castrar el roble podándole el muérdago (véase 50.2), del mismo modo en que se utilizaba una hoz ritual para segar la primera espiga de trigo. Esto daba la señal para el sagrado sacrificio de Zeus-rey; y en Atenas, Crono, que compartía un templo con Rea, era adorado como el dios de la Cebada, Sábado, anualmente cercenado en el sembrado y llorado como Osiris o Litierses o Mañeros (véase 136.e). Pero en la época a que se refieren estos mitos se permitía ya a los reyes prolongar sus reinados hasta un Año Grande de cien lunaciones y ofrecer víctimas anuales de niños en su lugar; de aquí que se describa a Crono como devorando a sus propios hijos para evitar el destronamiento. Porfirio (Sobre la abstinencia, ii.56) nos cuenta que los Curetes cretenses solían ofrecer sacrificios de niños a Crono en la antigüedad.
2. En Creta se sustituyó pronto a la víctima humana por un cabrito; en Tracia, por un ternero; entre los adoradores eolios de Posidón, por un potro; pero en los distritos atrasados de Arcadia todavía se comía sacrificialmente a niños, incluso en la era cristiana. No está claro si el ritual eleo era antropófago, o si, por ser Crono un Cuervo-Titán, se alimentaba a los cuervos sagrados con la víctima sacrificada.
3. El nombre de Amaltea. «tierna», demuestra que fue una diosa doncella; lo era una diosa-ninfa orgiástica (véase 56.1); Adrastea significa «la Inevitable», la Vieja oracular del otoño. Juntas formaban la habitual tríada de la Luna. Los griegos posteriores identificaron a Adrastea con la diosa pastoral Némesis, del fresno que produce la lluvia, la que se había convertido en una diosa de la venganza (véase 32.2). lo era representada en Argos como una vaca blanca en celo —algunas monedas cretenses de Praesus muestran a Zeus amamantado por ella—, pero Amaltea, que vivía en la «Colina de la Cabra», fue siempre una cabra; y Meliseo («hombre de miel»), el padre de Adrastea e Io, es en realidad su madre Melisa, la diosa como abeja-reina, quien mataba anualmente a su consorte varón. Tanto Diodoro Sículo (v.70) como Calímaco (Himno a Zeus, 49) hacen que las abejas alimenten al niño Zeus. Pero a su madre adoptiva se la describe también a veces como una cerda, porque ése era uno de los emblemas de las diosas viejas (véase 74.4 y 96.2). En las monedas cidonias es una perra, como la que amamantó a Neleo (véase 68.d). Las osas son los animales de Ártemis (véase 22.4 y 80.c) —los Curetes asistían a sus holocaustos— y Zeus como serpiente es Zeus Ctesio, protector de los almacenes, porque las serpientes acaban con los ratones.
4. Los Curetes eran los compañeros armados del rey sagrado, y el chocar de sus armas tenía por finalidad ahuyentar a los demonios durante las ceremonias rituales (véase 30.a). Su nombre, que los griegos posteriores interpretaban como «jóvenes que se han afeitado el cabello», probablemente significaba «devotos de Ker o Car», título muy difundido de la triple diosa (véase 57.2). Heracles obtuvo su cornucopia del toro Aqueloo (véase 142.d), y el enorme tamaño de los cuernos de las cabras monteses de Creta ha hecho que los mitógrafos que no conocen Creta hayan dado a Amaltea un cuerno de vaca anómalo.
5. Los helenos invasores parecen haber ofrecido su amistad a la población pre-helénica que profesaba el culto de los Titanes, pero poco a poco separaron de ellos a sus súbditos aliados e invadieron el Peloponeso. La victoria de Zeus en alianza con los gigantes de cien manos sobre los Titanes de Tesalia, según Thallus, historiador del siglo primero, citado por Taciano en su Alocución a los griegos, tuvo lugar «322 años antes del sitio de Troya», es decir, en 1505 a. de C., fecha admisible para una extensión del poderío heleno en Tesalia. La concesión de la soberanía a Zeus recuerda un acontecimiento análogo de la epopeya de la creación babilonia, cuando Marduk recibió poderes para luchar contra Tiamat de sus hermanos mayores Lahmu y Lahamu.
6. La hermandad de Hades. Posidón y Zeus recuerda la de la trinidad masculina védica —Mitra, Varuna e Indra— (véase 3.1 y 132.5) que aparece en un tratado hitita que ha sido fechado alrededor de 1380 a. de C.; pero en este mito parecen representar tres invasiones helenas sucesivas llamadas comúnmente jonia, eolia y aquea. Los adoradores pre-helenos de la diosa Madre asimilaron a los jonios, que se convirtieron en hijos de Io; domeñaron a los eolios, pero fueron arrollados por los aqueos. Los caudillos helenos primitivos, quienes se convirtieron en reyes sagrados de los cultos del roble y del fresno, adoptaron los títulos de «Zeus» y «Posidón» y se les obligaba a morir al final de su reinado establecido (véase 45.2). Esos dos árboles tienden a atraer el rayo y, por lo tanto, figuran en las ceremonias populares para conseguir la lluvia y el fuego en toda Europa.
7. La victoria de los aqueos puso fin a la tradición de los sacrificios reales. Clasificaron a Zeus y Posidón entre los inmortales, y representaban a ambos armados con el rayo: un hacha doble de pedernal que en otro tiempo había manejado Rea y que en las religiones minoica y micénica no podía ser utilizada por los varones (véase 131.6). Más tarde el rayo de Posidón se convirtió en un arpón de pesca de tres púas, pues sus principales devotos se habían hecho marinos; en tanto que Zeus conservó el suyo como símbolo de la soberanía suprema. El nombre de Posidón, que a veces se escribía Potidan, puede haber sido tomado del de su diosa madre, del cual recibió el suyo la ciudad de Potidea, «la diosa del agua del Ida»; Ida significaba toda montaña boscosa. Que los gigantes de las cien manos guardaran a los Titanes en el lejano oeste puede significar que los pelasgos, entre cuyos restos se hallaban los centauros de Magnesia —centauro es quizás análogo al latino centuria, «grupo guerrero de cien hombres»— no abandonaron su culto de los Titanes y siguieron creyendo en un Paraíso situado en el Lejano Oeste y en que Atlante sostenía el firmamento.
8. El nombre de Rea es probablemente una variante de Era. «tierra»; su ave principal era la paloma y su animal más importante el león de montaña. El nombre de Deméter significa «diosa de la Cebada»; Hestia (véase 20.c) es la diosa del hogar doméstico. La piedra de Delfos, utilizada en las ceremonias para provocar la lluvia, parece haber sido un meteorito de gran tamaño.
9. Dicte y el monte Liqueo eran antiguas sedes del culto de Zeus. Un sacrificio de fuego se ofrecía probablemente en el monte; Liqueo, donde ninguna criatura proyectaba su sombra; es decir, al mediodía en el solsticio de verano; pero Pausanias añade que si bien en Etiopía cuando el sol está en Cáncer los hombres no proyectan sombras, éste es invariablemente el caso en el monte Liqueo. Quizás se trate de un juego de palabras: a nadie que violaba aquel recinto se le permitía seguir viviendo (Arato: Fenómenos, 91), y era bien sabido que los muertos no arrojan sombras (Plutarco: Cuestiones griegas 39). La caverna de Psicro, considerada habitualmente como la Caverna Dictea, está mal ubicada para que sea la verdadera, que todavía no ha sido descubierta. Onfalión («ombliguito») sugiere la ubicación de un oráculo (véase 20.2).
10. El grito súbito de Pan que aterrorizó a los Titanes se hizo proverbial y ha dado la voz «pánico» (véase 26.c).
[1] Escoliasta sobre Apolonio de Rodas: i.1124.
[2] Apolodoro: i.1.5; Hesíodo: Teogonía 453-67.
[3] Polibio: xvi.12.6 y ss.; Pausanias: viii.38.5.
[4] Higinio: Astronomía poética ii.13; Arato: Fenómenos 163; Hesíodo: loc. cit.
[5] Filemón: Fragmento Ptergio i.l y ss.; Apolodoro: i.1.6; Ateneo: 375f. y 376a; Calímaco: Himno a Zeus 42.
[6] Hesíodo: 485 y ss.; Apolodoro: i.1.7; Primer Mitógrafo Vaticano: 104: Calímaco: Himno a Zeus 52 y ss.; Lucrecio: ii.633-9; Escoliasta sobre Arato: v.46; Higinio: Fábula 139.
[7] Higinio: loc. cit.; Apolodoro: loc. cit.; Hesíodo: loc. cit.
[8] Hesíodo: loc. cit.; Higinio: fábula 118; Apolodoro: i.1.7 y i.2.1; Calímaco: Himno a Zeus 52 y ss.; Diodoro Sículo: v.70; Eratóstenes: Catasterismoi 21; Pausanías: viii.8.2; Plutarco: Por qué callan los oráculos 16.
[9] Pausanias: x.24.5.
[10] Ibíd.: viii.8.2.
[11] Antonino Liberalis: Transformaciones 19; Calímaco: Himno a Zeus 8.
Traductor:Luis Echávarri, revisión: Lucía Graves
a. Crono se casó con su hermana Rea, a quien está consagrado el roble[1]. Pero la Madre Tierra y su moribundo padre Urano profetizaron que uno de sus hijos lo destronaría. En consecuencia, cada año devoraba a los hijos que le daba Rea: primeramente a Hestia, luego a Deméter y Hera, y más tarde a Hades y Posidón[2].
b. Rea estaba furiosa. Dio a luz a Zeus, su tercer hijo, en plena noche en el monte Liqueo de Arcadia, donde ninguna criatura proyecta su sombra[3] y, después de bañarlo en el río Neda, lo entregó a la Madre Tierra, quien lo llevó a Licto en Creta y lo ocultó en la cueva de Dicte en el monte Egeo. La Madre Tierra lo dejó allí para que lo criaran Adrastea, una ninfa del Fresno, su hermana Io, hijas ambas de Meliseo, y la ninfa-cabra Amaltea. Se alimentaba de miel y bebía la leche de Amaltea, con el chivo Pan, su hermano adoptivo. Zeus estaba agradecido a las tres ninfas por su bondad y cuando llegó a ser el Señor del Universo puso la imagen de Amaltea entre las estrellas, como Capricornio[4] y También tomó uno de sus cuernos, que parecía el de una vaca, y se lo dio a las hijas de Meliseo; se convirtió en la famosa Cornucopia, o cuerno de la abundancia, que está siempre lleno de todos los alimentos o bebidas que su poseedor pueda desear. Pero algunos dicen que Zeus fue amamantado por una cerda y cabalgaba montado en su lomo, y que perdió su cordón umbilical en Onfalión, cerca de Cnosos[5].
c. Alrededor de la cuna dorada del niño Zeus, la cual colgaba de un árbol (para que Cronos no lo pudiera encontrar ni en el cielo, ni en la tierra, ni en el mar) se hallaban los Cúreles armados, hijos de Rea. Golpeaban sus lanzas contra los escudos y gritaban para ahogar el llanto del niño, por temor a que Crono pudiera oírlo desde lejos. Rea había envuelto una piedra en pañales y la había entregado a Crono en el monte Taumacio de Arcadia y él la había devorado, creyendo que devoraba al niño Zeus. Sin embargo, Crono descubrió lo que había sucedido y persiguió a Zeus, quien se transformó a sí mismo en una serpiente y a sus nodrizas en osos: de aquí las constelaciones de la Serpiente y las Osas[6].
d. Zeus llegó a la virilidad entre los pastores del Ida, ocupando otra cueva; luego buscó por todos lados a Metis y la Titánide, quien vivía junto a la corriente del Océano. Por consejo de ella visitó a su madre Rea y le pidió que le nombrara copero de Crono. Rea le ayudó de buena gana en su venganza; le proporcionó la pócima emética que Metis le había encargado mezclar con la bebida dulce de Crono. Cuando Crono hubo bebido en abundancia vomitó primeramente la piedra y luego a los hermanos y hermanas mayores de Zeus. Salieron ilesos y, en agradecimiento, le pidieron que los encabezara en una guerra contra los Titanes, quienes eligieron al gigante Atlante como jefe, pues Crono había pasado ya de la flor de la vida[7].
e. La guerra duró diez años, pero al final la Madre Tierra profetizó la victoria para su nieto Zeus si éste tomaba como aliados a aquellos a quienes Crono había confinado en el Tártaro; en consecuencia, se acercó secretamente a Campe, la vieja carcelera del Tártaro, la mató, le quitó las llaves y después de poner en libertad a los Cíclopes y a los gigantes de las cien manos, los fortaleció con comida y bebida divinas. En consecuencia los Cíclopes le dieron a Zeus el rayo como arma ofensiva, a Hades un yelmo que la hacía invisible, y a Posidón un tridente. Después de celebrar los tres hermanos un consejo de guerra. Hades se presentó invisible ante Crono para robarle sus armas; y mientras Posidón le amenazaba con el tridente, desviando de este modo su atención, Zeus lo derribó con el rayo. Los tres gigantes de las cien manos alzaron rocas y las arrojaron contra los demás Titanes y un grito súbito de la Cabra-Pan los puso en fuga. Los dioses los persiguieron. Crono y todos los Titanes vencidos, excepto Atlante, fueron desterrados a una isla británica del lejano oeste (o, según algunos, confinados en el Tártaro), bajo la guardia de los gigantes de las cien manos. No volvieron a perturbar la Hélade. A Atlante pese a ser su jefe de guerra, se le impuso un castigo ejemplar, ordenándole sostener el firmamento sobre sus espaldas; pero se perdonó a las Titánides, en atención a Metis y Rea[8].
f. Zeus mismo instaló en Belfos la piedra que había vomitado Crono. Está todavía allí, se la unta constantemente con aceite y se ofrecen sobre ella hebras de lana destejida[9].
g. Algunos dicen que Posidón no fue devorado ni vomitado, sino que Rea dio a Crono en lugar de él un potro, y lo ocultó entre las manadas de caballos[10]. Y los cretenses, que son mentirosos, refieren que Zeus nace cada año en la misma cueva con un fuego centelleante y un chorro de sangre, y que cada año muere y lo en-tierran[11].
*
1. Rea, igualada con Crono como Titánide del séptimo día, puede ser igualada con Dione, o Diana, la triple diosa del culto de la paloma y el roble (véase 11.2). La podadera que llevaba Saturno, el equivalente latino de Crono. tenía la forma de pico de cuervo y al parecer se utilizaba en el séptimo mes del año sagrado de trece meses para castrar el roble podándole el muérdago (véase 50.2), del mismo modo en que se utilizaba una hoz ritual para segar la primera espiga de trigo. Esto daba la señal para el sagrado sacrificio de Zeus-rey; y en Atenas, Crono, que compartía un templo con Rea, era adorado como el dios de la Cebada, Sábado, anualmente cercenado en el sembrado y llorado como Osiris o Litierses o Mañeros (véase 136.e). Pero en la época a que se refieren estos mitos se permitía ya a los reyes prolongar sus reinados hasta un Año Grande de cien lunaciones y ofrecer víctimas anuales de niños en su lugar; de aquí que se describa a Crono como devorando a sus propios hijos para evitar el destronamiento. Porfirio (Sobre la abstinencia, ii.56) nos cuenta que los Curetes cretenses solían ofrecer sacrificios de niños a Crono en la antigüedad.
2. En Creta se sustituyó pronto a la víctima humana por un cabrito; en Tracia, por un ternero; entre los adoradores eolios de Posidón, por un potro; pero en los distritos atrasados de Arcadia todavía se comía sacrificialmente a niños, incluso en la era cristiana. No está claro si el ritual eleo era antropófago, o si, por ser Crono un Cuervo-Titán, se alimentaba a los cuervos sagrados con la víctima sacrificada.
3. El nombre de Amaltea. «tierna», demuestra que fue una diosa doncella; lo era una diosa-ninfa orgiástica (véase 56.1); Adrastea significa «la Inevitable», la Vieja oracular del otoño. Juntas formaban la habitual tríada de la Luna. Los griegos posteriores identificaron a Adrastea con la diosa pastoral Némesis, del fresno que produce la lluvia, la que se había convertido en una diosa de la venganza (véase 32.2). lo era representada en Argos como una vaca blanca en celo —algunas monedas cretenses de Praesus muestran a Zeus amamantado por ella—, pero Amaltea, que vivía en la «Colina de la Cabra», fue siempre una cabra; y Meliseo («hombre de miel»), el padre de Adrastea e Io, es en realidad su madre Melisa, la diosa como abeja-reina, quien mataba anualmente a su consorte varón. Tanto Diodoro Sículo (v.70) como Calímaco (Himno a Zeus, 49) hacen que las abejas alimenten al niño Zeus. Pero a su madre adoptiva se la describe también a veces como una cerda, porque ése era uno de los emblemas de las diosas viejas (véase 74.4 y 96.2). En las monedas cidonias es una perra, como la que amamantó a Neleo (véase 68.d). Las osas son los animales de Ártemis (véase 22.4 y 80.c) —los Curetes asistían a sus holocaustos— y Zeus como serpiente es Zeus Ctesio, protector de los almacenes, porque las serpientes acaban con los ratones.
4. Los Curetes eran los compañeros armados del rey sagrado, y el chocar de sus armas tenía por finalidad ahuyentar a los demonios durante las ceremonias rituales (véase 30.a). Su nombre, que los griegos posteriores interpretaban como «jóvenes que se han afeitado el cabello», probablemente significaba «devotos de Ker o Car», título muy difundido de la triple diosa (véase 57.2). Heracles obtuvo su cornucopia del toro Aqueloo (véase 142.d), y el enorme tamaño de los cuernos de las cabras monteses de Creta ha hecho que los mitógrafos que no conocen Creta hayan dado a Amaltea un cuerno de vaca anómalo.
5. Los helenos invasores parecen haber ofrecido su amistad a la población pre-helénica que profesaba el culto de los Titanes, pero poco a poco separaron de ellos a sus súbditos aliados e invadieron el Peloponeso. La victoria de Zeus en alianza con los gigantes de cien manos sobre los Titanes de Tesalia, según Thallus, historiador del siglo primero, citado por Taciano en su Alocución a los griegos, tuvo lugar «322 años antes del sitio de Troya», es decir, en 1505 a. de C., fecha admisible para una extensión del poderío heleno en Tesalia. La concesión de la soberanía a Zeus recuerda un acontecimiento análogo de la epopeya de la creación babilonia, cuando Marduk recibió poderes para luchar contra Tiamat de sus hermanos mayores Lahmu y Lahamu.
6. La hermandad de Hades. Posidón y Zeus recuerda la de la trinidad masculina védica —Mitra, Varuna e Indra— (véase 3.1 y 132.5) que aparece en un tratado hitita que ha sido fechado alrededor de 1380 a. de C.; pero en este mito parecen representar tres invasiones helenas sucesivas llamadas comúnmente jonia, eolia y aquea. Los adoradores pre-helenos de la diosa Madre asimilaron a los jonios, que se convirtieron en hijos de Io; domeñaron a los eolios, pero fueron arrollados por los aqueos. Los caudillos helenos primitivos, quienes se convirtieron en reyes sagrados de los cultos del roble y del fresno, adoptaron los títulos de «Zeus» y «Posidón» y se les obligaba a morir al final de su reinado establecido (véase 45.2). Esos dos árboles tienden a atraer el rayo y, por lo tanto, figuran en las ceremonias populares para conseguir la lluvia y el fuego en toda Europa.
7. La victoria de los aqueos puso fin a la tradición de los sacrificios reales. Clasificaron a Zeus y Posidón entre los inmortales, y representaban a ambos armados con el rayo: un hacha doble de pedernal que en otro tiempo había manejado Rea y que en las religiones minoica y micénica no podía ser utilizada por los varones (véase 131.6). Más tarde el rayo de Posidón se convirtió en un arpón de pesca de tres púas, pues sus principales devotos se habían hecho marinos; en tanto que Zeus conservó el suyo como símbolo de la soberanía suprema. El nombre de Posidón, que a veces se escribía Potidan, puede haber sido tomado del de su diosa madre, del cual recibió el suyo la ciudad de Potidea, «la diosa del agua del Ida»; Ida significaba toda montaña boscosa. Que los gigantes de las cien manos guardaran a los Titanes en el lejano oeste puede significar que los pelasgos, entre cuyos restos se hallaban los centauros de Magnesia —centauro es quizás análogo al latino centuria, «grupo guerrero de cien hombres»— no abandonaron su culto de los Titanes y siguieron creyendo en un Paraíso situado en el Lejano Oeste y en que Atlante sostenía el firmamento.
8. El nombre de Rea es probablemente una variante de Era. «tierra»; su ave principal era la paloma y su animal más importante el león de montaña. El nombre de Deméter significa «diosa de la Cebada»; Hestia (véase 20.c) es la diosa del hogar doméstico. La piedra de Delfos, utilizada en las ceremonias para provocar la lluvia, parece haber sido un meteorito de gran tamaño.
9. Dicte y el monte Liqueo eran antiguas sedes del culto de Zeus. Un sacrificio de fuego se ofrecía probablemente en el monte; Liqueo, donde ninguna criatura proyectaba su sombra; es decir, al mediodía en el solsticio de verano; pero Pausanias añade que si bien en Etiopía cuando el sol está en Cáncer los hombres no proyectan sombras, éste es invariablemente el caso en el monte Liqueo. Quizás se trate de un juego de palabras: a nadie que violaba aquel recinto se le permitía seguir viviendo (Arato: Fenómenos, 91), y era bien sabido que los muertos no arrojan sombras (Plutarco: Cuestiones griegas 39). La caverna de Psicro, considerada habitualmente como la Caverna Dictea, está mal ubicada para que sea la verdadera, que todavía no ha sido descubierta. Onfalión («ombliguito») sugiere la ubicación de un oráculo (véase 20.2).
10. El grito súbito de Pan que aterrorizó a los Titanes se hizo proverbial y ha dado la voz «pánico» (véase 26.c).
[1] Escoliasta sobre Apolonio de Rodas: i.1124.
[2] Apolodoro: i.1.5; Hesíodo: Teogonía 453-67.
[3] Polibio: xvi.12.6 y ss.; Pausanias: viii.38.5.
[4] Higinio: Astronomía poética ii.13; Arato: Fenómenos 163; Hesíodo: loc. cit.
[5] Filemón: Fragmento Ptergio i.l y ss.; Apolodoro: i.1.6; Ateneo: 375f. y 376a; Calímaco: Himno a Zeus 42.
[6] Hesíodo: 485 y ss.; Apolodoro: i.1.7; Primer Mitógrafo Vaticano: 104: Calímaco: Himno a Zeus 52 y ss.; Lucrecio: ii.633-9; Escoliasta sobre Arato: v.46; Higinio: Fábula 139.
[7] Higinio: loc. cit.; Apolodoro: loc. cit.; Hesíodo: loc. cit.
[8] Hesíodo: loc. cit.; Higinio: fábula 118; Apolodoro: i.1.7 y i.2.1; Calímaco: Himno a Zeus 52 y ss.; Diodoro Sículo: v.70; Eratóstenes: Catasterismoi 21; Pausanías: viii.8.2; Plutarco: Por qué callan los oráculos 16.
[9] Pausanias: x.24.5.
[10] Ibíd.: viii.8.2.
[11] Antonino Liberalis: Transformaciones 19; Calímaco: Himno a Zeus 8.
jueves, 11 de noviembre de 2010
1 EL MITO PELASGO DE LA CREACION
Robert Graves: "Los mitos griegos"
Traductor: Luis Echávarri, revisión: Lucía Graves
a. En el principio (Eurínome, la Diosa de Todas las Cosas, surgió desnuda del Caos, pero no encontró nada sólido en qué apoyar los pies y, en consecuencia, separó el mar del firmamento y danzó solitaria sobre sus olas. Danzó hacia el sur y el viento puesto en movimiento tras ella pareció algo nuevo y aparte con que poder empezar una obra de creación. Se dio la vuelta y se apoderó de ese viento norte, lo frotó entre sus manos y he aquí que surgió la gran serpiente Ofión.
Eurínome bailó para calentarse, cada vez más agitadamente, hasta que Ofión se sintió lujurioso, se enroscó alrededor de los miembros divinos y se ayuntó con la diosa. Ahora bien, el Viento Norte, llamado también Bóreas, fertiliza; por ello las yeguas vuelven con frecuencia sus cuartos traseros al viento y paren potros sin ayuda de un semental[1]. Así fue como Eurínome quedó encinta.
b. Luego asumió la forma de una paloma aclocada en las olas, y a su debido tiempo puso el Huevo Universal. A petición suya Ofión se enroscó siete veces alrededor de ese huevo, hasta que se empolló y dividió en dos. De él salieron todas las cosas que existen, sus hijos: el sol, la luna, los planetas, las estrellas, la tierra con sus montañas y ríos, sus árboles, hierbas y criaturas vivientes.
c. Eurínome y Ofión establecieron su residencia en el monte Olimpo, donde él irritó a la diosa pretendiendo ser el autor del Universo. Inmediatamente ella se golpeó en la cabeza con el talón le arrancó los dientes de un puntapié y lo desterró a las oscuras cavernas situadas bajo la tierra
d. A continuación la diosa creó las siete potencias planetarias y puso una Titánide y un Titán en cada una: Thía e Hiperion para el Sol; Febe y Atlante para la Luna; Dione y Cno para el planeta Marte; Metis y Ceo para el planeta Mercurio: Temis y Eurimedonte para el planeta Júpiter; Tetis y Océano para Venus: Rea y Crono para el planeta Saturno
2. Ofión, o Bóreas, es la serpiente demiurgo del mito hebreo y egipcio; en el arte mediterráneo primitivo se muestra constantemente a la Diosa en su compañía. Los pelasgos nacidos de la tierra, cuya pretensión parece haber sido que habían brotado de los dientes de Ofión. eran originariamente, quizás, el pueblo de los «géneros pintados» neolítico; llegaron a la tierra firme de Grecia desde Palestina alrededor de 3500 a. de C.. y los primeros helenos — inmigrantes del Asia Menor que habían pasado por las Cicladas — los encontraron ocupando el Peloponeso 700 años después. Pero el nombre de «pelasgos» llego a aplicarse vagamente a todos los habitantes pre-helénicos de Grecia. Así Eurípides (citado por Estrabón v.2.4.) cuenta que los pelasgos adoptaron el nombre de «danaides» a la llegada a Argos de Dánao y sus 50 hijas (véase 60.f). Las censuras de su conducta licenciosa (Herodoto: vi. 137) se refieren probablemente a la costumbre pre-helénica de las orgías eróticas. Estrabón dice en el mismo pasaje que a los que vivían cerca de Atenas se los llamaba Pelargi («cigüeñas»): quizás esa era su ave totémica.
3. Los Titanes («señores») y las Titánides tenían sus equivalentes en la astrología babilonia y palestina primitiva, en la que eran deidades que regían los 7 días de la semana planetaria sagrada; y pueden haber sido introducidas por los cananeos o hititas, colonia que se estableció en el Istmo de Corinto a comienzos del segundo milenio a. de C. (véase 67.2), o también por los heladas primitivos. Pero cuando el culto de los Titanes fue abolido en Grecia y la semana de 7 días dejó de figurar en el calendario oficial, su número fue citado como 12 por algunos autores, probablemente para hacer que correspondieran con los signos del zodíaco. Hesíodo, Apolodoro, Estéfano de Bizancio, Pausanias y otros dan listas contradictorias de sus nombres. En el mito babilonio los gobernantes planetarios de la semana, a saber, Samas, Sin, Nergal, Bel, Beltis y Ninib, eran todos varones, excepto Beltis, la diosa del amor; pero en la semana germana, que los celtas habían tomado del Mediterráneo oriental, el Domingo, el Martes y el Viernes eran gobernados por Titánides, en lugar de Titanes. A juzgar por el carácter divino de las parejas de hijos e hijas de Éolo (véase 43.4), y el mito de Níobe (véase 77.1), se decidió, cuando el sistema llegó por primera vez a la Grecia pre-helénica desde Palestina, emparejar a una Titánide con cada Titán, como medio de salvaguardar los intereses de la diosa. Pero antes de que pasara mucho tiempo los catorce quedaron reducidos a una compañía mixta de siete. Las potencias planetarias eran las siguientes:
el Sol para la iluminación, la Luna para el encantamiento.
Marte para el crecimiento,
Mercurio para la sabiduría,
Júpiter para la ley.
Venus para el amor.
Saturno para la paz.
Los astrólogos griegos clásicos, de acuerdo con los babilonios, adjudican los planetas a Helio, Selene, Ares, Hermes (o Apolo), Zeus, Afrodita y Crono, cuyos equivalentes latinos, citados anteriormente, todavía dan el nombre a las semanas francesa, italiana y española.
4. Al final, míticamente hablando, Zeus devoró a los Titanes, incluyendo su propio ser anterior, puesto que los judíos de Jerusalén adoraban a un Dios transcendente, compuesto por todas las potencias planetarias de la semana, teoría simbolizada en el candelabro de siete brazos y en los Siete Pilares de la Sabiduría. Los siete pilares planetarios elevados cerca de la Tumba del Caballo en Esparta estaban, según Pausanias (iii.20.9), adornados a la manera antigua, y quizá tenían relación con los ritos egipcios introducidos por los pelasgos (Herodoto: ii.57). Si los judíos tomaron la teoría de los egipcios, o al contrario, no se sabe con seguridad; pero el llamado Zeus Heliopolitano, del que trata A. B. Cook en su Zeus (i.570-76), era de carácter egipcio y llevaba bustos de las siete potencias planetarias como ornamentos frontales en su cuerpo y, habitualmente, también bustos de los restantes olímpicos como ornamentos traseros. Una estatuilla en bronce de este dios se encontró en Tortosa, España; otra, en Biblos, Fenicia; y una estela de mármol de Marsella muestra seis bustos planetarios y una figura de cuerpo entero de Hermes —a quien se da también la mayor prominencia en las estatuillas—, probablemente como el inventor de la astronomía. En Roma, Quinto Valerio Sorano pretendía igualmente que Júpiter era un dios transcendente, aunque allí no se observaba la semana como en Marsella, Biblos y (probablemente) en Tortosa. Pero a las potencias planetarias nunca se les permitió influir en el culto olímpico oficial, pues se las consideraba no griegas (Herodoto: i.131), y por lo tanto antipatrióticas: Aristófanes (La paz, 403 y ss.) hace decir a Trigeo que la Luna y «ese viejo bellaco, el Sol» preparan una conspiración para entregar Grecia a los persas.
5. La afirmación de Pausanias de que Pelasgo fue el primer hombre testimonia la continuación de una cultura neolítica en Arcadia hasta la época clásica.
[1]Plinio: Historia natural IV. 35 y VIII. 67; Homero: Ilíada XX. 223.
[2] Sólo unos fragmentos poco esclarecidos de este mito prehelénico-sobreviven en la literatura griega de los cuales los más extensos son los de Apolonio de Rodas. Argonautica i.496-505, y Tzetzes: Sobre Licofrón; 1191; pero está implícito en los Místerios Orficos y se puede restaurar, como se hace arriba, con el Fragmento Berosiano y las cosmogonías tenidas citadas por Philo Byblius y Damascio; con los elementos cananeos del relato de la creación hebrea; con Higinio (Fábula 197; véase 62.a) ; con la leyenda beocia de los dientes del dragón (véase 58.5); y con el arte ritual primitivo. Que todos los pelasgos nacieron de Ofión lo indica su sacrificio común, el Peloría (Ateneo: xiv 45.639-40), pues Ofión era un Pelor, o 'serpiente prodigiosa'.
[3] Homero: Ilíada v.898; Apolonio de Rodas: ii.1232; Apolodoro: i.1.3; Hesíodo: Teogonía. 133; Estéfano de Bizancio sub Adana; Aristófanes: Las aves 692 y ss.; Clemente de Roma: Homilías vi.4.72; Proclo sobre el Timeo de Platón, ii, p. 307.
[4] Pausanías: viii.1.2
[3]. Pero el primer hombre fue Pelasgo, progenitor de los pelasgos; surgió del suelo de Arcadia, seguido de algunos otros, a los que enseñó a construir chozas, alimentarse de bellotas y coser túnicas de piel de cerdo como las que la gente pobre lleva todavía en Eubea y Fócida[4].
*1. En este sistema religioso arcaico no había hasta entonces dioses ni sacerdotes sino solamente una diosa universal y sus sacerdotisas, pues la mujer constituía el sexo dominante y el hombre era su víctima asustada. No se honraba la paternidad y se atribuía la concepción al viento, la ingestión de habichuelas o a la deglución accidental de un insecto; la herencia era matrilineal y a las culebras se las consideraba encarnaciones de los muertos. Eurínome («amplio vagabundeo») era el título de la diosa como la luna visible; su nombre sumerio era Lahu («paloma eminente»), título que más tarde pasó a Jehová como el Creador. Fue en forma de paloma como Marduk la dividió simbólicamente en dos en el Festival de Primavera babilónico, cuando inauguró el nuevo orden mundial.[2].
miércoles, 10 de noviembre de 2010
MEDICINA Y ASTROLOGIA, introduccion
Con el nombre de Astromedicina se denomina a un conjunto muy variado y heterogéneo de prácticas de diagnosis, prevención y tratamiento de las enfermedades. El común denominador de estas prácticas es el empleo en mayor o menor grado de conceptos astrológicos pues de algún modo aceptan la existencia de influencias astrológicas en la enfermedad y en la salud del paciente.
Es imposible en un breve articulo enumerar de forma exhaustiva todas las diferentes practicas que podrían englobarse en esta denominación pero en forma muy sintética si podemos clasificarlas en dos grandes ramas: aquellas que se basan en el poder curativo de la mente y las que utilizan algún tipo de agentes físicos, sean hierbas, minerales, colores, medicamentos, etc.
Con el nombre de Medicina Ecléctica se suele denominar a este tipo de prácticas y sus practicantes, algunos de ellos médicos licenciados combinan los tratamientos tradicionales con otros más heterodoxos. En doctor Cornell sugiere que los mejores médicos eclécticos suelen tener Marte o los signos de virgo y Escorpio prominentes en su horóscopo.
Manuscrito de cirugía de John of Arderne "Espejo de Flebotomia y practica de la cirugía, Inglaterra 1425-1550". En esta pagina se observa el "hombre zodiacal" con sus correspondencias astrológicas
Dentro de la astromedicina psicológica están aquellas que emplean el poder de mente, la fe y las cualidades sugestivas-psicologías específicas del sanador, medico, curandero, doctor, o como queramos llamar a la persona que realiza la curación.
En estas practicas se emplean la imposición de manos, como medio de canalizar la energía astral, los ritos religiosos como medio de crear un clímax adecuado a la curación, el hipnotismo, como forma de predisponer al paciente a recibir el tratamiento, la oración, la concentración mental, la sugestión , etc.
Quienes trabajan con este tipo de practicas tratan de poner al servicio de la curación las diversas corrientes o fuerzas magnéticas, o en general cósmicas que existan en el universo y que de algún modo operan sin que se conozca su naturaleza ni sus efectos precisos. Por eso se le denomina, en forma genérica e imprecisa, fuerzas ocultas. Se supone la existencia de estas fuerzas en virtud de los efectos reales después de su invocación, y podemos aceptar que se originan en la mente tanto del paciente como del sanador por lo que les llamamos también energías psíquicas. Algunas escuelas hablan de psicoplasma y psicoestructuras para denominar la especial materia sutil de que están formadas lo que denominan, por analogía, psicocelulas, a cada uno de los pensamientos, impulsos, deseos etc. que se forman en nuestro interior.
Urano bien aspectado y fuerte en su horóscopo hace de los sanadores más susceptibles e interesados en este tipo de métodos, como sugiere el Dc. Cornell. Estos mismos indicadores en la carta del paciente hacen de este más fácilmente tratable con estos métodos. Sin embargo, observa este doctor que un neptuno débil o afligido por malos aspectos, tanto en la carta del sanador como en la del paciente puede resultar peligroso, pues los tratamientos pueden derivar hacia comportamientos obsesivos, magia negra, espiritualidad patológica, etc.
Lo que se conoce como curación metafísica entra dentro de este grupo de practicas y aquí nos referimos a la curación a distancia mediante la oración, determinados ritos religiosos como son las misas, los rezos de rosarios, etc., En estos casos los mejores sanadores son los que tiene Neptuno y Urano fuertes en sus horóscopos sin aflicciones que pudieran pervertirlos en su influencia. También resulta adecuada la posición de la Luna en Cáncer o en Piscis tanto para sanador como para el paciente, pues le hace más susceptible a recibir este tipo de tratamiento.
El planeta que rige la curación y otros asuntos de cariz espiritual es Neptuno. Indicaciones de predisposición a tener buenas cualidades para ser un buen sanador espiritual son tener tanto Neptuno como Plutón fuertes en el horóscopo, una conjunción del Sol con Neptuno en la casa 1 o en la casa 10 y ambos bien aspectados. Fortalecen el poder curativo del sanador tanto los sextiles como los trígonos de Plutón a Neptuno en el horóscopo radical del sanador.
En relación con el segundo grupo de tratamientos astrológicos el más conocido es el de las sales zodiacales el Dc Schuessler. Este doctor propone una relación entre cada signo del zodiaco con una diferente sal:
Aries - fosfato potásico
Tauro – sulfato sódico
Géminis – cloruro potásico
Cáncer – fluoruro de calcio
Leo - fosfato magnésico
Virgo – sulfato potásico
Libra – fosfato sódico
Escorpio – Sulfato de sílice
Sagitario – “sílice”
Capricornio – fosfato de sílice
Acuario - cloruro sódico
Piscis – fosfato férrico
Según este método terapéutico, estas sales deben tomarse en mayor cantidad en periodos de debilidad, enfermedad, etc., y siempre en forma vegetal, es decir a partir de los alimentos vegetales que las contienen en mayor concentración. También propone este Dc. Que el agua mineral debería evitarse por las personas mayores debido a su alta concentración de mineralización inorgánica y en cambio propone el empleo de agua destilada.
En estas practicas se emplean la imposición de manos, como medio de canalizar la energía astral, los ritos religiosos como medio de crear un clímax adecuado a la curación, el hipnotismo, como forma de predisponer al paciente a recibir el tratamiento, la oración, la concentración mental, la sugestión , etc.
Quienes trabajan con este tipo de practicas tratan de poner al servicio de la curación las diversas corrientes o fuerzas magnéticas, o en general cósmicas que existan en el universo y que de algún modo operan sin que se conozca su naturaleza ni sus efectos precisos. Por eso se le denomina, en forma genérica e imprecisa, fuerzas ocultas. Se supone la existencia de estas fuerzas en virtud de los efectos reales después de su invocación, y podemos aceptar que se originan en la mente tanto del paciente como del sanador por lo que les llamamos también energías psíquicas. Algunas escuelas hablan de psicoplasma y psicoestructuras para denominar la especial materia sutil de que están formadas lo que denominan, por analogía, psicocelulas, a cada uno de los pensamientos, impulsos, deseos etc. que se forman en nuestro interior.
Urano bien aspectado y fuerte en su horóscopo hace de los sanadores más susceptibles e interesados en este tipo de métodos, como sugiere el Dc. Cornell. Estos mismos indicadores en la carta del paciente hacen de este más fácilmente tratable con estos métodos. Sin embargo, observa este doctor que un neptuno débil o afligido por malos aspectos, tanto en la carta del sanador como en la del paciente puede resultar peligroso, pues los tratamientos pueden derivar hacia comportamientos obsesivos, magia negra, espiritualidad patológica, etc.
Lo que se conoce como curación metafísica entra dentro de este grupo de practicas y aquí nos referimos a la curación a distancia mediante la oración, determinados ritos religiosos como son las misas, los rezos de rosarios, etc., En estos casos los mejores sanadores son los que tiene Neptuno y Urano fuertes en sus horóscopos sin aflicciones que pudieran pervertirlos en su influencia. También resulta adecuada la posición de la Luna en Cáncer o en Piscis tanto para sanador como para el paciente, pues le hace más susceptible a recibir este tipo de tratamiento.
El planeta que rige la curación y otros asuntos de cariz espiritual es Neptuno. Indicaciones de predisposición a tener buenas cualidades para ser un buen sanador espiritual son tener tanto Neptuno como Plutón fuertes en el horóscopo, una conjunción del Sol con Neptuno en la casa 1 o en la casa 10 y ambos bien aspectados. Fortalecen el poder curativo del sanador tanto los sextiles como los trígonos de Plutón a Neptuno en el horóscopo radical del sanador.
En relación con el segundo grupo de tratamientos astrológicos el más conocido es el de las sales zodiacales el Dc Schuessler. Este doctor propone una relación entre cada signo del zodiaco con una diferente sal:
Aries - fosfato potásico
Tauro – sulfato sódico
Géminis – cloruro potásico
Cáncer – fluoruro de calcio
Leo - fosfato magnésico
Virgo – sulfato potásico
Libra – fosfato sódico
Escorpio – Sulfato de sílice
Sagitario – “sílice”
Capricornio – fosfato de sílice
Acuario - cloruro sódico
Piscis – fosfato férrico
Según este método terapéutico, estas sales deben tomarse en mayor cantidad en periodos de debilidad, enfermedad, etc., y siempre en forma vegetal, es decir a partir de los alimentos vegetales que las contienen en mayor concentración. También propone este Dc. Que el agua mineral debería evitarse por las personas mayores debido a su alta concentración de mineralización inorgánica y en cambio propone el empleo de agua destilada.
Este es un típico gráfico de efemérides gráficas de Ebertin, según series de 15, 45 o 90 grados
El Dc. Ebertin, astrólogo de bastante renombre en Alemania, cuya obra no esta traducida al castellano, hace un interesante estudio de astromedicina, basado en lo que el denomina el “astrorama anual” que permite una visión de conjunto de periodos largos de vida y sus momentos mas críticos o mas propicios para contraer enfermedades. La astrología de Ebertin y su escuela, rechaza la división en casas del horóscopo y se basa sobre todo en los aspectos y Puntos Medios. Tiene estudiados un buen número de alimentos y sus propiedades astrológicas con fines médicos. Sus estudios recuerdan algo los apuntes más sencillos e intuitivos del sabio español de la edad media Ramón Llul.
Los estudios astrológicos de periodos fértiles e infértiles en la ovulación femenina también pertenecen a esta materia médica. Sobre este asunto existen numerosos estudios bien documentados debido a la aplicación a ellos de numerosos investigadores profesionales de la medicina y de la bioquímica.
Por ultimo es necesario destacar en esta materia el gran esfuerzo de sistematización de la astromedicina realizada por el Dc. Cornell en su obra “Enciclopedia de astrología médica”, que ya cite antes.
Los estudios de Astromedicina están en sus comienzos y es posible que aparezcan nuevos avances en esta materia a la par que en otras ramas de la medicina. Los modernos estudios sobre genética, la informática aplicada a la medicina, etc. pueden dar sorpresas por su probable relación con algunos principios astrológicos, formulados antes de forma intuitiva y que pudieran ahora verse confirmados con mayor precisión científica.
lunes, 8 de noviembre de 2010
31.- LOS DIOSES DEL MUNDO SUBTERRÁNEO
Robert Graves: "Los mitos griegos"[1] y tiene como tributarios el Aqueronte, el Flegetonte, el Cacito, el Aornis y el Lete. Las almas pobres tenían que esperar eternamente en la orilla más cercana, a menos que eludieran a Hermes, su conductor, y se deslizaran por una entrada trasera, como la del Ténaro laconio[2] o la del Aornis tesproto. Un perro de tres cabezas o, según dicen algunos, de cincuenta, llamado Cerbero, guarda la orilla opuesta del Estigia, dispuesto a devorar a los intrusos vivientes o a las almas fugitivas[3].
b. La primera región del Tártaro contiene los tristes Campos de Asfódelos, donde las almas de los héroes vagan sin propósito entre las multitudes de muertos menos distinguidos que se agitan como murciélagos y donde solamente Orion tiene todavía valor para cazar a los ciervos espectrales[4]. No hay uno solo que no prefiriese vivir esclavo de un campesino pobre a gobernar en todo el Tártaro. Su único placer consiste en las libaciones de sangre que les proporcionan los vivientes; cuando las beben vuelven a sentirse casi hombres. Más allá de esas praderas se hallan el Erebo y el palacio de Hades y Perséfone. A la izquierda del palacio, según se acerca a él, un ciprés blanco da sombra al estanque del Lete, adonde van para beber las almas comunes. Las almas iniciadas evitan ese agua, y prefieren beber, en cambio, en el estanque del Recuerdo, sombreado por un álamo [?] blanco, lo que les da cierta ventaja sobre sus compañeros[5]. En las cercanías, las almas recién llegadas son juzgadas a diario por Minos, Radamantis y Éaco en un lugar donde confluyen tres caminos. Radamantis juzga a los asiáticos y Éaco a los europeos, pero ambos remiten los casos difíciles a Minos, A medida que se dicta cada sentencia las almas son conducidas por uno de los tres caminos: el que lleva de vuelta a las Praderas de Asfódelos, si no son virtuosas ni malas; el que lleva al campo de castigos del Tártaro si son malas; y el que lleva a los jardines del Elíseo si son virtuosas.
c. El Elíseo, gobernado por Crono, se halla cerca de los dominios de Hades y su entrada está próxima al estanque del Recuerdo, pero no forma parte de ellos; es una región feliz donde el día es perpetuo, sin frío ni nieve; donde nunca cesan los juegos, la música y los jolgorios, y donde los habitantes pueden elegir su renacimiento en la tierra en cualquier momento que lo deseen. En las cercanías están las Islas de los Bienaventurados, reservadas para quienes han nacido tres veces y han alcanzado tres veces el Elíseo[6]. Pero algunos dicen que hay otra Isla de los Bienaventurados llamada Leuce en el Mar Negro, frente a la desembocadura del Danubio, arbolada y llena de animales salvajes y domesticados, donde las ánimas de Helena y Aquiles viven en una fiesta constante y declaman versos de Hornero a los héroes que tomaron parte en los acontecimientos celebrados por él[7].
d. Hades, que es feroz y celoso de sus derechos, rara vez visita el aire superior, excepto por asuntos de trabajo o cuando de pronto se siente dominado por la lujuria. En una ocasión deslumbró a la ninfa Mente con el esplendor de su carro de oro y sus cuatro caballos negros, y la habría seducido sin dificultad si la reina Perséfone no hubiese aparecido a tiempo y metamorfoseado a Mente en una menta fragante. En otra ocasión Hades trató de violar a la ninfa Leuce, que se transformó igualmente en el álamo blanco que se alza junto al estanque del Recuerdo[8]. Se complace en no permitir que ninguno de sus súbditos, y pocos de los que visitan el Tártaro vuelvan vivos para describirlo, lo que le hace el más odiado de los dioses.
e. Hades nunca sabe lo que está sucediendo en el mundo superior ni en el Olimpo[9], excepto la información fragmentaria que le llega cuando los mortales golpean sus manos en la tierra y le invocan con juramentos y maldiciones. Su pertenencia más apreciada es el yelmo de la invisibilidad que le dieron como muestra de agradecimiento los Cíclopes cuando consintió en ponerlos en libertad por orden de Zeus. Todas las riquezas en joyas y metales preciosos ocultas bajo la tierra son suyas, pero no posee nada sobre ella, con excepción de ciertos templos lóbregos en Grecia y, probablemente, un rebaño de ganado vacuno en la isla de Eriteya, que, según dicen algunos, pertenece realmente a Helio[10].
f. La reina Perséfone, no obstante, puede ser benigna y misericordiosa. Es fiel a Hades, pero no tiene hijos con él y prefiere la compañía de Hécate, diosa de las brujas, a la de él[11]. El propio Zeus honra a Hécate tanto que nunca le niega la antigua facultad de la que ha gozado siempre: la de conceder o negar a los mortales cualquier don que deseen. Tiene tres cuerpos y tres cabezas: de león, perro y yegua[12].
g. Tisífone, Alecto y Megera, las Erinias o Furias, viven en el Erebo y son más viejas que Zeus o que cualquiera de los otros olímpicos. Su tarea consiste en oír las quejas de los mortales contra la insolencia de los jóvenes con los ancianos, de los hijos con los padres, de los huéspedes con los anfitriones, y de los amos de casa o ayuntamientos con los suplicantes, y castigar esos delitos acosando a los culpables implacablemente, sin descanso ni pausa, de ciudad en ciudad y de país en país. Esas Erinias son viejas, con serpientes por cabellera, cabezas de perro, cuerpos negros como el carbón, alas de murciélago y ojos inyectados de sangre. Llevan en las manos azotes tachonados con bronce y sus víctimas mueren atormentadas[13]. Es imprudente mencionarlas por su nombre en la conversación; de aquí que se las llame habitualmente Euménides, que significa «las bondadosas», así como a Hades se le llama Plutón o Pluto, «el Rico».*
1. Los mitógrafos hicieron un esfuerzo audaz para con- . ciliar las visiones contradictorias del otro mundo que tenían los habitantes primitivos de Grecia. Una de ellas era que las almas vivían en sus tumbas, o en cavernas o grietas subterráneas, donde podían tomar la forma de serpientes, ratones o murciélagos, pero nunca se reencarnaban como seres humanos. Otra era que las almas de los reyes sagrados se paseaban visiblemente en las islas sepulcrales donde habían sido enterrados sus cuerpos. Una tercera era que las ánimas podían volver a ser hombres si entraban en habichuelas, nueces o peces y las comían sus futuras madres. Una cuarta era que iban al Lejano Norte, donde nunca brilla el sol, y volvían, si lo hacían, sólo como vientos fertilizantes. Una quinta era que iban al Lejano Oeste, donde el sol se pone en el océano, y formaban un mundo de los espíritus muy parecido al presente. Una sexta era que el alma era castigada de acuerdo con la vida que había llevado. A éstas agregaron finalmente los órficos la teoría de la metempsicosis, o sea la transmigración de las almas, proceso que en cierto grado podía ser dirigido mediante el empleo de fórmulas mágicas.
2. Perséfone y Mecate representaban la esperanza de regeneración pre-helénica; mientras que Hades era el concepto helénico de la inevitabilidad, lo inevitable de la muerte. Crono, a pesar de sus antecedentes sanguinarios, seguía gozando de los placeres del Elíseo, puesto que ése había sido siempre el privilegio de un rey sagrado, y a Menelao (Odisea iv.561) se le prometió el mismo goce, no porque hubiese sido particularmente virtuoso o valiente, sino porque se había casado con Helena, la sacerdotisa de la diosa Luna espartana (véase 159.1). El adjetivo homérico asphodelos, aplicado solamente a leimónes («praderas»), significa probablemente «en el valle de lo que no se reduce a cenizas» (de a = no, spodos = ceniza, elos = valle), o sea el alma del héroe después de haber sido quemado su cuerpo; excepto en la Arcadia, donde se comían bellotas, las raíces y semillas de asfódelo, ofrecidas a esas almas, constituían la dieta griega corriente antes de la introducción del cereal. Los asfódelos se dan en abundancia incluso en las islas que carecen de agua, y las almas, como los dioses, son conservadoras en su régimen alimenticio. Elíseo parece significar «tierra de manzanas» —alisier es una palabra pre-gala con que se denomina a la serba—, lo mismo que la arturiana «avalen» y la latina «avernus» o «avolnus», ambas formadas con la raíz indo-europea abol, que significa manzana.
3. Cerbero era el equivalente griego de Anubis, el hijo de la cabeza de perro de Nephthys, la diosa de la Muerte libia, quien conducía a las almas al mundo subterráneo. En el folklore europeo, que es en parte de origen libio, las almas de los condenados eran perseguidas hasta el Infierno Septentrional por una jauría aulladora de sabuesos —los sabuesos de Annwm, Herne, Arthur o Gabriel— mito derivado de la ruidosa emigración estival de los gansos silvestres a sus lugares de cría en el círculo ártico. Cerbero teñía al principio cincuenta cabezas, como la jauría espectral que destruyó a Acteón (véase 22.1); pero después tres cabezas, como su ama Hécate (véase 134.1).
4. Estigia («odiado») es un pequeño arroyo de Arcadia cuyas aguas se suponía que eran mortalmente venenosas, y sólo los mitógrafos posteriores lo ubicaron en el Tártaro. Aqueronte («corriente de dolor») y Cocito («lamento») eran nombres fantásticos para describir la calamidad de la muerte. Aornis («sin aves») es una traducción griega errónea de la palabra italiana «Avernus». Lete significa «olvido»; y Erebo «cubierto». Flegetonte («ardiente») se refiere a la costumbre de la cremación, pero también, quizás, a la teoría de que los pecadores eran quemados en corrientes de lava. Tártaro parece ser una reduplicación de la palabra pre-helena tar, que se da en los nombres de lugares situados al oeste; su significado de infierno lo recibe posteriormente.
5. Los álamos negros estaban consagrados a la diosa Muerte (véase 51.7 y 170.1) y los álamos blancos, o temblones, bien a Perséfone como diosa de la Regeneración, o bien a Heracles por haber rastrillado el Infierno (véase 134.f). Cofias doradas de hojas de álamo temblón se han encontrado en cementerios mesopotámicos del cuarto milenio a. de C. Las tablillas órficas no nombran al árbol situado junto al estanque del Recuerdo; es probablemente el álamo blanco en que se transformó Leuce, pero posiblemente un avellano, el emblema de la Sabiduría (véase 86.1). La madera de ciprés blanco, considerada como anticorruptiva, era utilizada para hacer arcas caseras y ataúdes.
6. Hades tenía un templo al pie del monte Mente en Elide, y su violación de Mente («menta») probablemente ha sido deducida del empleo de la menta en los ritos fúnebres, juntamente con el romero y el mirto, para neutralizar el olor de descomposición. El agua de cebada de Deméter que se bebía en Eleusis estaba condimentada con menta (véase 24.e). Aunque se le concedió el ganado del sol en Eriteya («tierra roja») porque allí era donde el Sol moría todas las noches, a Hades se lo llama más comúnmente Crono, o Geriones en este contexto (véase 132.4).
7. La información que da Hesíodo sobre Hécate demuestra que ésta era la diosa triple original, suprema en el cielo, la tierra y el Tártaro; pero los helenos destacaban sus poderes destructores a expensas de los creadores, hasta que por fin sólo se la invocaba en los ritos clandestinos de la magia negra, especialmente en los lugares donde confluían tres caminos. Que Zeus no le negase la antigua facultad de conceder a los mortales lo que deseaban es un tributo a las brujas tesalias, a las que todos temían. El león, el perro y el caballo, sus cabezas, se refieren evidentemente al antiguo año tripartito, ya que el perro es la estrella-perro Sirio; lo mismo sucede con las cabezas de Cerbero.
8. Las compañeras de Hécate, las Erinias, eran la personificación de los remordimientos de conciencia después de haber violado una prohibición, al principio sólo la prohibición de insultar, desobedecer o hacer violencia a una madre (véase 105.k y 114.1). Los suplicantes y los huéspedes quedaban bajo la protección de Hestia, diosa del Hogar (véase 20.c) y maltratarlos equivalía a desobedecerle e insultarle a ella.
9. Leuce, la isla más grande del Mar Negro, pero muy pequeña no obstante, es ahora una colonia penal rumana sin árboles.
Traductor:Luis Echávarri, revisión: Lucía Graves
a. Cuando las almas descienden al Tártaro, cuya entrada principal se halla en un bosque de álamos negros junto al océano, los piadosos parientes proveen a cada una con una moneda que colocan bajo la lengua de su cadáver. Así pueden pagar a Caronte, el avaro que los transporta en una embarcación desvencijada al otro lado del Estigia. Este río aborrecible linda con el Tártaro por el lado occidental
[1] Pausanias: x .28.1.
[2] Apolodoro: ii.5.2; Estrabón: viii.5.1.
[3] Homero: Ilíada viii.368; Teogonía 311; Apolodoro: loe. cit.; Eurípides: Heracles 24.
[4] Homero: Odisea xi.539; xi.572-5; xi.487-91.
[5] Tablilla órfica de Petelia.
[6] Platón: Gorgias 168; Píndaro: Odas olímpicas ii.68-80; Hesíodo: Trabajos y Días 167ff.
[7] Pausanias: iii.19-11; Heroica x.32-40.
[8] Estrabón: viii.3.14; Servio sobre Églogas de Virgilio vii.61.
[9] Homero: Ilíada ix.158-9; xx.61.
[10] Homero: Ilíada ix.567 y ss.; Apolodoro: ii.5.10; Escoliasta sobres las Odas ístmicas de Píndaro vi.32.
[11] Apolonio de Rodas: iii.529; Ovidio: Metamorfosis xiv.405; Escoliasta sobre los Idilios de Teócrito: ii.12.
[12] Hesíodo: Teogonía 411-52.
[13] Apolodoro: i.1.4; Homero: Ilíada ix.454-7; xv.204; xix.259; Odisea ii.135 y xvii.475; Esquilo: Euménides 835 y Portadores de libaciones 290 y 924; Eurípides: Orestes 317 y ss.; Himno órfico lxviii.5.
lunes, 1 de noviembre de 2010
ASTROMETEOROLOGIA 3: CARACTERISTICAS DE PLANETAS Y SIGNOS EN LAS CARTAS CLIMATICAS
El Sol:
En las cartas de Temperatura, en general, produce calor y soleamiento. Con aspectos discordantes al Ascendente, anticipa un invierno muy frió.
En las cartas de viento en general es indicativo de calmas., pero con elementos violentos se suma a ellos incrementando los efectos perniciosos. En determinadas condiciones producirá vientos muy fuertes, como por ejemplo El Sol[conjunción]Mercurio {C4}; El Sol [Oposición] Urano o El Sol[cuadratura]Marte
En cartas de humedad en general indica tiempo seco. En una combinación lluviosa producira relámpagos y aspectando al ascendente producira lluvia.
La Luna:
En las cartas de temperatura, en general, enfria moderadamente. Aspectando al Ascendente tiende a los cambios de temperatura.
En las cartas de viento es indicativa de brisas.
En las cartas de humedad es el factor mas humedo. Aspectando al Ascendente tiende al mayor grado de humedad posible.
Mercurio:
En las cartas de temperatura tiende a enfriar de forma consistente. En aspectos con el Ascendente produce calor.
En las cartas de viento produce viento de forma permanente
En las cartas de humedad, en general, es un factor de sequedad pero en una carta tormentosa añadira lluvia y viento.
Venus:
En las cartas de temperatura tiende a moderar. Aspectando al Ascendente tiende a moderar excepto en aspectos muy disonantes.
En cartas de viento tambien tiende a moderar
En las cartas de humedad indicara ,en general, humedad y lluvias beneficas
Marte:
En las cartas de temperatura tiende a calentar mas que ningun otro. Aspectando al ascendente tiende a producir bajadas de temperatura desastrosas.
En las cartas de viento no lo poduce pero tiende a agravarlo hasta llegar a ser destructivo
En las cartas de humedad en un factor que tiende a producir tiempo seco.
Jupiter:
En las cartas de temperatura tiende a calentar de forma suave
En cartas de viento produce suaves brisas pero si esta muy aflijido puede sumarse a una combinacion destructiva.
En las cartas de humedad es el factor mas seco
Saturno:
En cartas de temperatura es tormentoso y extremo en frio o extremo en calor hasta el punto de ser destructivo
En cartas de viento, en general pruducira calma pero se sumara a una combinacion violenta aumentando su destructividad.
En cartas de humedad es muy humedo. Indica inundaciones violentas pero en periodos secos añadira sequia
Urano:
En cartas de temperatura es en general frio con cambios repentinos. En cartas de viento indicara, en general mucho viento. Su influencia sera violenta y destructiva
En cartas de humedad indica tiempo seco o bien lluvias con tormenta electrica.
Neptuno:
En cartas de temperatura en general indica tiempo frio con tendencia a cambios caprichosos
En cartas de viento en general calma pero se sumara a un combinacion violenta, y en las cartas de humedad tiende a nieblas y aumentara la lluvia y su violencia
Pluton:
En las cartas de temperatura indica tiempo en general frio con tendencia producir condiciones extremas. En las cartas de viento producira viento de naturaleza violenta y destructiva, y en las cartas de humedad tendera a producir lluvia y humedad, tambien nieblas; Producira tormentas de muerte y destruccion con Pluton[conjuncion] Urano y con Pluton [conjuncion] Saturno
CARACTERISTICAS GENERALES DE LOS SIGNOS EN LAS CARTAS CLIMATICAS
temperatura
viento
humedad
Aries: Calor, viento y tiempo muy seco con lluvia en c(1) o en c(4), violencia y lluvia
Tauro: Tiende a moderar la temperatura, produce calma en las cartas de viento y tiempo muy humedo y lluvioso.
Geminis: En las cartas de temperatura indica frio y cambios. En las de viento mucho viento; y en las de humedad tiempo seco.
Cancer :Frio moderado, calma y muy humedo.
Leo: Calor y sequedad. En las cartas de viento calmas. En las cartas de humedad es muy electrico.
Virgo: En las cartas de temperatura produce frio moderado; en las de viento un viento uniforme; y en las de humedad tiempo seco.
Libra: frio moderado, brisas y tiempo seco.
Escorpio: Frio y calor extremos, vientos huracanados y tiempo humedo.
Sagitario: Tiempo caliente, vientos moderados y sequedad.
Capricornio: Frio extremo, vientos fuertes y humedad e inundaciones
Acuario Frio extremo, brisas y aparato electrico.
Piscis: Frio, calma y humedad.
El Sol:
En las cartas de Temperatura, en general, produce calor y soleamiento. Con aspectos discordantes al Ascendente, anticipa un invierno muy frió.
En cartas de humedad en general indica tiempo seco. En una combinación lluviosa producira relámpagos y aspectando al ascendente producira lluvia.
En las cartas de Temperatura, en general, produce calor y soleamiento. Con aspectos discordantes al Ascendente, anticipa un invierno muy frió.
En las cartas de viento en general es indicativo de calmas., pero con elementos violentos se suma a ellos incrementando los efectos perniciosos. En determinadas condiciones producirá vientos muy fuertes, como por ejemplo El Sol[conjunción]Mercurio {C4}; El Sol [Oposición] Urano o El Sol[cuadratura]Marte
La Luna:
En las cartas de temperatura, en general, enfria moderadamente. Aspectando al Ascendente tiende a los cambios de temperatura.
En las cartas de viento es indicativa de brisas.
En las cartas de humedad es el factor mas humedo. Aspectando al Ascendente tiende al mayor grado de humedad posible.
Mercurio:
En las cartas de temperatura tiende a enfriar de forma consistente. En aspectos con el Ascendente produce calor.
En las cartas de viento produce viento de forma permanente
En las cartas de humedad, en general, es un factor de sequedad pero en una carta tormentosa añadira lluvia y viento.
Venus:
En las cartas de temperatura tiende a moderar. Aspectando al Ascendente tiende a moderar excepto en aspectos muy disonantes.
En cartas de viento tambien tiende a moderar
En las cartas de humedad indicara ,en general, humedad y lluvias beneficas
Marte:
En las cartas de temperatura tiende a calentar mas que ningun otro. Aspectando al ascendente tiende a producir bajadas de temperatura desastrosas.
En las cartas de viento no lo poduce pero tiende a agravarlo hasta llegar a ser destructivo
En las cartas de humedad en un factor que tiende a producir tiempo seco.
Jupiter:
En las cartas de temperatura tiende a calentar de forma suave
En cartas de viento produce suaves brisas pero si esta muy aflijido puede sumarse a una combinacion destructiva.
En las cartas de humedad es el factor mas seco
Saturno:
En cartas de temperatura es tormentoso y extremo en frio o extremo en calor hasta el punto de ser destructivo
En cartas de viento, en general pruducira calma pero se sumara a una combinacion violenta aumentando su destructividad.
En cartas de humedad es muy humedo. Indica inundaciones violentas pero en periodos secos añadira sequia
Urano:
En cartas de temperatura es en general frio con cambios repentinos. En cartas de viento indicara, en general mucho viento. Su influencia sera violenta y destructiva
En cartas de humedad indica tiempo seco o bien lluvias con tormenta electrica.
Neptuno:
En cartas de temperatura en general indica tiempo frio con tendencia a cambios caprichosos
En cartas de viento en general calma pero se sumara a un combinacion violenta, y en las cartas de humedad tiende a nieblas y aumentara la lluvia y su violencia
Pluton:
En las cartas de temperatura indica tiempo en general frio con tendencia producir condiciones extremas. En las cartas de viento producira viento de naturaleza violenta y destructiva, y en las cartas de humedad tendera a producir lluvia y humedad, tambien nieblas; Producira tormentas de muerte y destruccion con Pluton[conjuncion] Urano y con Pluton [conjuncion] Saturno
CARACTERISTICAS GENERALES DE LOS SIGNOS EN LAS CARTAS CLIMATICAS
temperatura
viento
humedad
Aries: Calor, viento y tiempo muy seco con lluvia en c(1) o en c(4), violencia y lluvia
Tauro: Tiende a moderar la temperatura, produce calma en las cartas de viento y tiempo muy humedo y lluvioso.
Geminis: En las cartas de temperatura indica frio y cambios. En las de viento mucho viento; y en las de humedad tiempo seco.
Cancer :Frio moderado, calma y muy humedo.
Leo: Calor y sequedad. En las cartas de viento calmas. En las cartas de humedad es muy electrico.
Virgo: En las cartas de temperatura produce frio moderado; en las de viento un viento uniforme; y en las de humedad tiempo seco.
Libra: frio moderado, brisas y tiempo seco.
Escorpio: Frio y calor extremos, vientos huracanados y tiempo humedo.
Sagitario: Tiempo caliente, vientos moderados y sequedad.
Capricornio: Frio extremo, vientos fuertes y humedad e inundaciones
Acuario Frio extremo, brisas y aparato electrico.
Piscis: Frio, calma y humedad.
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