viernes, 31 de diciembre de 2010

El Tarot de los Bohemios. Parte 1. Papus

Gérard Anaclet Vincent Encausse, conocido como "Papus", nació en La Coruña (España), el 13 de julio de 1865, y murió a la temprana edad de 51 años, en París el 25 de octubre de 1916. Como ocultista estuvo ligado a la Sociedad Teosófica de H. Blavaski hasta 1890, año en que se aparto de esta asociación y con solo 25 años de edad, fundo grupos independientes de estudios ocultistas. Papus pensaba que además de la tradición tibetana que defendía H. Blavaski debía tomarse en consideración la tradición egipcia, pero es seguro debieron existir otros motivos mas fuertes para la ruptura con la Sociedad Teosófica, que desconocemos.  En cualquier caso resulta extraña la militancia de un joven francés culto e inteligente como Papus comulgando con las ideas racistas y proto-fascistas de la teosofía blavaskiana. Debia ser duro admitir a un francés medio español (la madre de Papus era española) que tenia que adscribirse a una "raza inferior" a la raza de los "anglosajones y teutones", a los que Blavaski consideraba como la "raza aria superior" dentro de su esquizofrenica elucubracion racista. Hoy, con la perspectiva historica que tenemos, hay que admitir que al salirse de la Sociedad Teosófica, Papus dio un paso inteligente que le honra. "El Tarot de la Bohemios" es un trabajo menor de Papus, todavia algo influenciado por las ideas tesoficas de su juventud, pero no por ello menos interesante:


EL TAROT DE LOS BOHEMIOS
Papus
" Se denomina Tarot a un conjunto de símbolos impresos en láminas o cartas atribuidos al legendario Hermes Trimegisto, y que se emplean comúnmente para la predicción, habiendo llegado hasta nosotros desde lejanísima época por intermedio de los llamados gitanos o bohemios. Esta baraja es para ellos la biblia de las biblias y en un tiempo les facilitó el diario vivir, pues con las mismas decían la buenaventura y eran también un motivo continuo de ocio, puesto que les permitía entretenerse jugando.


El Dr. Gerard Encausse (1866-1916), célebre ocultista que ha firmado sus interesantes escritos con el seudónimo de PAPUS, en este libro nos revela los misterios y secretos del enigmático Tarot, que lo considera como un libro maravilloso que tiene carácter cosmológico, filosófico, iniciático, y adivinatorio, siendo la base sintético-simbólica de todos los pueblos antiguos, pues aunque el hombre común no ve en este conjunto de cartas otra cosa que un simple pasatiempo, los pensadores vuelven a encontrar en ellas la clave de una olvidada tradición esotérica. Este interesante y erudito trabajo está entonces respaldado por el prestigio del expositor, también notable médico y cabalista, quien investigó en las más diversas fuentes y consultó a las más eminentes autoridades en la materia para ofrecernos una obra que ya es clásica dentro del tema."



PRIMERA PARTE
CLAVE GENERAL DEL TAROT
CAPÍTULO PRIMERO

INTRODUCCIÓN AL ESTUDIO DEL TAROT

"Es por lo que hay que abrir el libro y sopesar cui­dadosamente cuanto sea deducido. Entonces reconoce­réis que la droga contenida en su interior era muy diferente a lo que prometía su estuche; es decir que las materias aquí tratadas no eran tan disparatadas como podría inferirse del título que las encabeza."   RABELAIS.

Próxima muerte del materialismo — La síntesis — La ciencia ocul­ta — Las sociedades secretas — Los cultos — El pueblo, órgano de transmisión del esoterismo — Los bohemios — La palabra sagrada de la masonería — Nuestro trabajo.

Estamos en la víspera de una transformación total de nuestros métodos científicos. El materialismo ha dado cuanto era posible esperar de él y los investigadores, desilusionados en su mayoría, es­peran del porvenir lo suficiente como para no descansar por más tiempo sobre los errores del presente. El análisis ha sido llevado, en todas las ramas de nuestros conocimientos, tan lejos como era po­sible; lo cual no ha hecho más que aumentar la profundidad de los barrancos que separan las ciencias.

La síntesis es necesaria; mas, ¿cómo realizarla? Si nos dignamos abandonar por un instante nuestra creencia en el progreso indefinido y en la superioridad fatal de las nuevas generaciones sobre las antiguas, descubriremos fácilmente que las colosales civilizaciones del pasado tuvieron también una ciencia, uni­versidades y escuelas.

La India y el Egipto están todavía sembradas de restos pre­ciosos, que revelan al arqueólogo la existencia de esta ciencia an­tigua.

En la actualidad nos hallamos en condiciones para afirmar que la característica dominante de esta enseñanza era la síntesis, la cual reunía en algunas leyes muy simples la suma de todos los conocimientos adquiridos.

Es importante enumerar las causas que nos han hecho perder esta síntesis, casi por completo.

Antiguamente la ciencia era enseñada a ciertas personas apro­piadas que habían logrado salir airosas de una serie de pruebas. Esta enseñanza se realizaba en el templo, bajo el nombre de mis­terios; el sabio tomaba entonces el título de sacerdote o iniciado. La ciencia era otrora secreta u oculta; de aquí el nombre de ciencia oculta, conferida por los contemporáneos a la síntesis antigua.

Otra causa que explica la poca difusión de las elevadas enseñan­zas está representada por la falta de medios de transporte y por las extensas rutas que era necesario recorrer para alcanzar los más importantes centros iniciáticos.

Sin embargo cuando los iniciados presintieron que se aproxima­ba el momento en el cual todos sus conocimientos quedarían defi­nitivamente perdidos para la humanidad, apelaron a todos los me­dios imaginables para salvar a la síntesis de la destrucción que la amenazaba. Para ello se les ofrecía tres medios principales:


1° Las sociedades secretas, continuación directa de los miste­rios.2° Los cultos, expresión simbólica de las elevadas enseñanzas, para el vulgo.3° Por último, los mismos pueblos, transformados en incons­cientes depositarios de la ciencia.

Veamos qué ha hecho cada grupo del depósito que le fuera con­fiado.


LAS SOCIEDADES SECRETAS

La escuela de Alejandría constituyó la fuente principal de la que emanaron las sociedades secretas occidentales.
La mayoría de los iniciados se habían refugiado en Oriente, y hace relativamente poco tiempo, fue revelado al Occidente que en la India, y sobre todo en el Tibet, algunas fraternidades ocultas conservaban intacta la síntesis antigua.
Pero la existencia en Oriente de dicha ciencia nos interesa me­nos que la historia del desarrollo de las sociedades iniciáticas en el Occidente.

Las sectas Gnósticas, los Árabes, los Alquimistas, los Templa­rios, los Rosacruces y, por último, los Masones, forman la cadena occidental de transmisión de la ciencia oculta.

Una simple ojeada sobre las enseñanzas de estas asociaciones nos permitiría comprobar que la Masonería actual ha perdido casi por completo el sentido de los símbolos tradicionales, que constituía precisamente el depósito que debía transmitir de edad en edad.

Todas las ceremonias del ritual aparecen ridículas al grosero sentido común del abogado o del tendero, vivientes representantes en la hora actual, de las profundas enseñanzas de la antigüedad.
Debemos, no obstante, hacer algunas excepciones en favor de ciertos grandes pensadores, tales como Ragon y algunos otros.
En resumen, la Masonería ha perdido el depósito que le fuera confiado, y, ella sola, no puede darnos la ley sintética que bus­camos.

LOS CULTOS

Las sociedades secretas debían ante todo transmitir en su sim­bolismo el aspecto científico de la iniciación primitiva, en cam­bio las sectas religiosas debían dar preferencia al lado filosófico y metafísico de la enseñanza.

Todo sacerdote de un culto antiguo era un iniciado, es decir que sabía perfectamente que no existía más que una sola religión y que la diferencia de los cultos respondía a la necesidad de adap­tarla al temperamento de cada pueblo en particular.

De lo dicho se desprende una consecuencia importante, y es que el sacerdote de un dios, cualquiera que éste fuera, era honro­samente acogido en el templo de cualquier otro dios e invitado a ofrendarle sacrificio. Sin embargo, sería un lamentable error ver en esto una prueba de politeísmo. El gran sacerdote judío de Jerusalem recibió en el templo a un iniciado, Alejandro el Grande, y lo condujo al sagrado santuario para ofrecer un sacrificio.

Nuestras querellas religiosas por la supremacía de un culto de­terminado habría hecho reír a un sacerdote iniciado, de la anti­güedad, incapaz de concebir que hombres inteligentes puedan ig­norar la identidad de religión expresada por todos los cultos.

Semejante sectarismo, defendido por dos cultos ciegos para sus propios errores: los cristianos y los musulmanes, es la causa que motivó la pérdida total de la enseñanza secreta, que daba la clave de la unidad sintética.

Desde luego sería más fácil encontrar la síntesis en la Masone­ría que en nuestras religiones occidentales.

Tan sólo los Judíos poseen, si no el sentido, al menos la letra de su tradición oral o cábala. La Biblia escrita en el idioma judío constituye, desde este punto de vista, una verdadera maravilla. Con­tiene todas las tradiciones ocultas, pero el verdadero sentido de la Biblia no ha sido jamás revelado. Solamente los trabajos de Fabre D' Olivet han dado comienzo a esta tarea prodigiosa y la tra­ducción del Génesis ha sido al fin reconstituida por Saint Yves d'Alueydre en su "Teogonía de los Patriarcas". Los ignorantes des­cendientes de la inquisición, cuya sede está en Roma, han puesto en el índex estos estudios. El porvenir los juzgará.

No obstante cada culto tiene su tradición, su libro, su Biblia que enseña, a los que entienden, la unidad de ese culto con todos los demás.

El Sepher Bereschit de Moisés es la Biblia judía, el Apocalip­sis y el Evangelio Esotérico forman la Biblia cristiana, la Leyenda de Hiram es la Biblia masónica, la Odisea la del pretendido politeísmo griego, la Eneida la de Roma, en fin, los Vedas hindú y el Corán musulmano son demasiado conocidos para hablar de ellos.

Cuando se posee la clave, todas estas biblias revelan una misma doctrina. Esta llave, que puede abrir el esoterismo, está perdida para los sectarios de nuestros cultos occidentales. Por lo tanto es inútil bus­carla entre ellos.

LOS PUEBLOS

Los sabios no se habían hecho muchas ilusiones respecto al porvenir de esta tradición confiada a la inteligencia y virtud de las generaciones futuras.

Moisés había elegido un pueblo para preservar a través de las edades el libro que resumía toda la ciencia del Egipto; pero antes de Moisés, los iniciados hindúes eligieron otro para transmitir a las generaciones venideras la enseñanza primitiva de las grandes civilizaciones de la Atlántida.

El pueblo no ha burlado jamás las esperanzas de aquellos que depositaron en él su buena fe. Ignorando las verdades que posee, no se preocupa de alterarlas en lo más mínimo y considera un sacri­legio el más leve atentado contra su depósito.

Así es como los Judíos nos han transmitido, intactas, todas las letras que forman el Sepher de Moisés. Pero Moisés no resolvió el problema en la forma magistral como lo hicieron los Tibetanos.
Entregar a un pueblo un libro para que lo adore y lo conserve intacto, está bien; pero dar a un pueblo un libro que le ayude a vivir, es todavía mejor.
El pueblo encargado de transmitir, desde la más lejana anti­güedad, el conocimiento oculto, es el pueblo bohemio.

LOS BOHEMIOS

Los bohemios poseen una biblia; esta biblia les facilita el dia­rio vivir, pues con ella predican la buenaventura; esta biblia es también un motivo continuo de ocio, puesto que les permite entre­tenerse jugando.

Sí, ese juego de cartas denominado Tarot, que poseen los bohemios, es la biblia de las biblias. Es el libro de Thot-Hermes-Trismegisto, es el libro de Adán, es el libro de la revelación pri­mitiva de las antiguas civilizaciones.

Cuando el Masón, hombre inteligente y virtuoso, ha perdido la tradición; cuando el sacerdote, hombre igualmente inteligente y vir­tuoso, ha perdido su esoterismo; los Bohemios, hombres ignorantes y viciosos, nos dan la clave que nos permitirá explicar todos los simbolismos.
¿Cómo no admirar la sabiduría de estos iniciados que han utilizado el vicio y le han hecho producir, desde el punto de vista del bien, mejores resultados que a la virtud?
Este juego de cartas de los bohemios es un libro maravilloso, como acertadamente lo ha observado Court de Gébelin y sobre todo Vaillant. Este juego, con el nombre de Tarot, Torá, Rota, ha formado sucesivamente la base de la enseñanza sintética de todos los pueblos antiguos.

Allí donde el hombre del pueblo no ve otra cosa que un simple pasatiempo, los pensadores vuelven a encontrar la clave de esta oscura tradición. Raymond Lulle basa su Ars Magna sobre el Tarot y logra reemplazar el cerebro humano con el automatismo de aquél;
Jerome Cardan escribe sobre las claves del Tarot un tratado de la sutilidad; Guillaume Postel halla en el Tarot la llave de las cosas ocultas y Louis Claude de Saint Martin, el filósofo desconocido, ve descriptos en ellos los lazos misteriosos que unen a Dios, el Universo y el Hombre.
Es gracias al Tarot que hallaremos y desarrollaremos esta ley sintética encerrada en todos los simbolismos.
...
INRI es la palabra que os revela la identidad de vuestro origen, o Masones o Católicos.

Igne Natura Renovatur Integra.
lesus Nazareus Rex ludeorum son los polos opuestos, científi­cos y religiosos, físicos y metafísicos de una idéntica doctrina.

IOD HÉ-VAU-HÉ  es la palabra que os señala la uni­dad de vuestro origen, ¡oh! Masones, ¡oh! Cabalistas. TAROT, TORÁ, ROTA son las palabras que os indican a todos vosotros, orientales y occidentales, la unidad de vuestros deberes y aspiraciones en el Eterno Adán-Eva, fuente de todos nuestros conocimientos y creen­cias.
Salud, pues, nómades bohemios, a quienes agradecemos la con­servación de este maravilloso instrumento, resumen sintético de toda la enseñanza antigua.

NUESTRO TRABAJO

Comenzaremos por un estudio preliminar respecto a los elemen­tos de la cábala y de los números.

Munido de estos datos, expondremos en todos sus detalles la construcción del Tarot, estudiando por separado cada una de las piezas que componen nuestra máquina, para luego pasar a la acción que cada una ejerce sobre la otra. Seremos en este punto lo más explícitos posible.

A continuación abordaremos algunas aplicaciones de la máqui­na, pero solamente algunas, dejando al verdadero investigador el cuidado de hallar las demás. Limitaremos nuestro trabajo a una sola clave, constituida por una fórmula sintética; facilitaremos tan sólo la herramienta de trabajo. Aquellos que desean aprender que la utilicen a su sabor, y, con toda seguridad, apreciarán la utilidad de sus esfuerzos y de los nuestros.

Aquellos que suponen que la ciencia oculta no debe ser develada pueden estar tranquilos. La experiencia nos ha demostrado que pue­de decirse todo sin temor; sólo comprenderán aquellos que deben comprender; los demás tildan a nuestros escritos de oscuros e inin­teligibles.

lunes, 27 de diciembre de 2010

El Tarot de los Bohemios. 2ª Parte. PAPUS

Gérard Anaclet Vincent Encausse, conocido como "Papus", nació en La Coruña (España), el 13 de julio de 1865, y murió a la temprana edad de 51 años, en París el 25 de octubre de 1916. Como ocultista estuvo ligado a la Sociedad Teosófica de H. Blavaski hasta 1890, año en que se aparto de esta asociación y con solo 25 años de edad, fundo grupos independientes de estudios ocultistas. Papus pensaba que además de la tradición tibetana que defendía H. Blavaski debía tomarse en consideración la tradición egipcia, pero es seguro debieron existir otros motivos mas fuertes para la ruptura con la Sociedad Teosófica, que desconocemos. En cualquier caso resulta extraña la militancia de un joven francés culto e inteligente como Papus comulgando con las ideas racistas y proto-fascistas de la teosofía blavaskiana. Debia ser duro admitir a un francés medio español (la madre de Papus era española) que tenia que adscribirse a una "raza inferior" a la raza de los "anglosajones y teutones", a los que Blavaski consideraba como la "raza aria superior" dentro de su esquizofrenica elucubracion racista. Hoy, con la perspectiva historica que tenemos, hay que admitir que al salirse de la Sociedad Teosófica, Papus dio un paso inteligente que le honra. "El Tarot de la Bohemios" es un trabajo menor de Papus, todavia algo influenciado por las ideas tesoficas de su juventud, pero no por ello menos interesante:

CAPÍTULO SEGUNDO ("El Tarot de los Bohemios" Papus)

EL NOMBRE SAGRADO IOD-HE-VAU-HE

La cábala y el nombre sagrado — La iod — La hé — La vau, — La 2a hé — Síntesis del nombre sagrado.

Si debemos creer a la antigua tradición oral o cábala, existe un nombre sagrado que revela, al mortal que descubra la verdadera pronunciación, la clave de todas las ciencias divinas y humanas. Este nombre que los israelitas no pronuncian jamás, y que el gran sacer­dote decía una vez al año en medio de los gritos del pueblo profano, es aquel que se halla en la cima de todas las iniciaciones, aquel que irradia en el centro del triángulo resplandeciente correspondiente al grado 33 de la Masonería Escocesa, aquel que se instala sobre el pór­tico de nuestras viejas catedrales; está formado por cuatro letras he­breas y se lee: iod-hé-vau-hé.


Se las emplea en el Sepher Bereschit o Génesis de Moisés para designar la divinidad, y su construcción gramatical es tal que recuer­da por su misma estructura los atributos conferidos a Dios por los buenos deseos de los hombres.


A continuación veremos que los poderes atribuidos a esta pala­bra constituyen, hasta cierto punto, una realidad, atento a que abren con facilidad la puerta simbólica del arca que contiene la revela­ción de toda la ciencia antigua. Por lo tanto nos es indispensable entrar en algunos detalles a dicho respecto.

Esta palabra está formada por cuatro letras, iod, hé, vau, hé. Esta última se halla repetida dos veces.

A cada letra del alfabeto hebraico se le asigna un número. Vea­mos los que corresponden a las letras que nos ocupan

 iod = 10 hé = 5vau = 6

El valor numérico total del nombre iod-hé-vau-hé será entonces:

10+5+6+5 = 26

Consideremos por separado cada una de estas letras.

Todas las letras del alfabeto hebreo no son otra cosa que una serie de combinaciones resultantes del arreglo o permutación de la letra iod. El estudio sintético de la naturaleza, había hecho pensar a los antiguos que los fenómenos naturales eran dirigidos por la actuación de una sola ley. Esta ley, base de la analogía, colocaba la unidad-principio en el origen de las cosas y consideraba a las mis­mas como el reflejo, en grados diversos, de aquella unidad-prin­cipio. Por lo tanto, la iod, formando por sí sola todas las letras y, en consecuencia, todas las palabras y frases, era justamente la imagen y representación de esta unidad-principio, cuyo conocimiento estaba vedado a los profanos.

En consecuencia, la ley que presidió a la creación del idioma de los Hebreos es la misma que presidió a la creación del Universo, y conocer la una es conocer implícitamente la otra. He aquí lo que tiende a demostrar uno de los más antiguos libros de cábala, el Sepher Jesirah.

Antes de continuar, aclaremos mediante un ejemplo la defini­ción que hicimos de la iod. La primera letra del alfabeto Hebreo, aleph, está formada por cuatro iod opuestas dos a dos. Lo mismo ocurre con todas las demás letras.

El valor numérico de la iod conduce a otras consideraciones. La UNIDAD-PRINCIPIO, según la doctrina de los cabalistas, es también la UNIDAD-FIN de los seres y de las cosas, y la eternidad no es, desde este punto de vista, más que un eterno presente. Por esto los anti­guos simbolistas (symbolistes) han expresado esta idea mediante un punto en el centro de un círculo; representando la unidad-principio por la circunferencia, línea sin comienzo ni fin.

Según esto, la unidad expresa la suma de todos los seres creados, los cuales representan sus partes constitutivas; lo mismo que la unidad-hombre está formada por la suma de los miles de millones de células que constituyen su ser.

En el origen de todas las cosas, la cábala sitúa la afirmación ab­soluta del ser por sí mismo, del ser-unidad, cuya representación sim­bólica es la iod, y el número 10 como expresión numérica. Este número (10) representando la unión del principio-todo (1) a la nada-ninguno (0) se adapta perfectamente a las condiciones exigidas.

LA HE
Mas el Yo no puede concebirse sino como opuesto al No Yo. Apenas nos afirmamos como tal Yo, nos vemos en la obligación de aceptar idéntica afirmación de parte del YO-ABSOLUTO, de lo cual inferimos la noción de su existencia.

Este es el origen de la "dualidad", de la oposición, del Binario —imagen de la femineidad—, así como la unidad es la imagen de la masculinidad.

Diez, dividiéndose para oponerse a sí mismo, da cinco (5), número exacto de la letra "hé" —segunda del gran nombre sagrado.

La "hé" representará así el "pasivo" referido a la "iod", que simbolizará el "activo"; el "no yo" referido al "yo"; la "mujer" en relación al "hombre"; la "sustancia" en relación a la "esencia"; la "vida" con referencia al "alma", etcétera.

LA VAU
Mas la oposición del Yo al No Yo produce un nuevo factor, la relación entre el Yo y el No Yo.

Luego, la "vau", sexta letra del alfabeto hebreo, generada por 10 (iod) + 5 (hé) = 15 = 1 + 5 = 6, representa un "corchete" y también una "relación"; es el corchete que reúne los opuestos en la naturaleza, constituyendo el tercer término de esta trinidad:
Yo ­­­­­_________ No Yo
Relación del Yo con el No Yo


LA SEGUNDA HE

Más allá de la trinidad, considerada como ley, nada puede existir. La trinidad es la fórmula sintética y absoluta que comprende to­das las ciencias. Esta fórmula, cuyo valor científico parecía ya olvi­dado, nos ha sido transmitida íntegramente por todas las religiones (depositarias inconscientes de la CIENCIA-SABIDURÍA de las primitivas civilizaciones).

Es debido a esto que el nombre sagrado está constituido tan sólo por tres letras. El cuarto término se halla compuesto por la re­petición de la letra "hé"

Esta repetición señala el tránsito de la ley Ternaria a una nueva aplicación, podríamos decir: la transición del mundo metafísico al mundo físico, y, en términos generales, de un mundo cualquiera a su inmediato subsecuente.

El conocimiento de esta propiedad, que caracteriza a la segun­da "hé", es la clave de aplicación del nombre divino. En lo que sigue presentaremos la prueba de esta afirmación.


RESUMEN SOBRE EL NOMBRE IOD-HE-VAU-HE

Conociendo el valor de cada uno de los términos que comprende el nombre sagrado, hagamos la síntesis y totalicemos los resultados obtenidos.
El nombre "iod-hé-vau-hé" está formado por cuatro letras, sig­nificando cada una de ellas:
La "iod": El principio activo por excelencia.
El yo = 10.

La "hé"; El principio pasivo por excelencia.
El no yo = 5.

La "vau": El término medio, el corchete que reúne el activo con el pasivo, la relación del Yo con el No Yo = 6.

Estos tres términos expresan la ley ternaria del ABSOLUTO. La "2a hé": La que determina el paso de un mundo a otro, expresa la transición.

Esta segunda "hé" representa al ser total, encerrando en una unidad absoluta los tres términos que lo constituyen: YO-NO YO-RELACIÓN; el paso del noumeno al fenómeno y, recíprocamente, el paso de una gama a otra gama. Es la semilla que contiene en germen al futuro árbol.

REPRESENTACIÓN DEL NOMBRE SAGRADO

El nombre "iod-hé-vau-hé" puede representarse de muchas ma­neras, cualquiera de ellas nos demostrará su utilidad. Por ejemplo, en forma de círculo:

Mas como la 2ª "hé", término de transición, resulta la entidad activa de la gama siguiente, es decir: como la 2a "hé" re­presenta en realidad una "iod" en germen, se puede escribir el nom­bre sagrado colocando la 2a "hé" debajo de la primera "iod", del siguiente modo
 10      5          6iod - 1° hé - vau - 2° hé
                                   5
Una tercera manera de escribir el nombre sagrado sería sinte­tizando en la 2a "hé" la trinidad "iod-hé-vau-hé".

Abandonemos por ahora estas consideraciones, sobre las cuales volveremos más tarde, y hablemos un poco de la concepción pita­górica de los números.

LA IOD La iod, configurada por una coma y también por un punto, re­presenta el principio de las cosas.

domingo, 26 de diciembre de 2010

TRATADO DE ASTROLOGIA (MARQUES DE VILLENA) - 1




AQUÍ COMIENZA EL

TRACTADO DE ASTROLOGÍA (1428)


que fizo en romanze
don Enrique de Aragón, Marques de Villena (1384-1434)
señor de Iniesta, el cual es departido con las tablas e muchos passos de su invençión


Alano, doctor famoso e poeta speculativo, fablando de la ocçiosidat en el prohemio del Comento astrologal sobre Tholomeo dize: «La vida sin fructo peor es que muerte». Esso mesmo Isidoro, De sumo bono, dize: «Aquel es siervo que vive segúnd sí mesmo». Otrosí, Aristoxeno dize: «Quien aplaze a los otros más que a sí, de sí siervo faze señor». Otrosí, dize en el Libro del amorío Tulio: «Passión propria es de amor servirse amado de amador». Por Resvalio fue, por ende, considerado la vida sin fructu ser muerte; et vevir segúnd sí mesmo, servidumbre; et aplazer a los nobles ser dignidat; et que proprio amor del buen servidor es maginar en qué fará serviçio a su señor.
Por ende, pensé, mediante la bondat de Dios, de enderçarvos por serviçio del cavallero don Enrique de Aragón, señor de Iniesta, que vos copiló esta parte de la astrología escogida con las muchas piezas e pasos de su invençión, poderos loar et catar en uestro obispado de Burgos. Por que soplico a los leyentes aver atençión e, si bien non trasladé, sométolo a correcçión de sancta Iglesia.
Et por ende, aquésta será partida en dos partes. En la primera trataré de los helementos en general e de cada uno en speçial. Et en la segunda parte trataré de todos los cuerpos spéricos según sus movimientos. Et para esto proseguir porné primeramente dos capítulos: en el primero diré en qué manera Dios crió el mundo, por dar comienço en este tratado a mi razón; en el segundo diré dell alma prinçipiada: es perpetua e es medio con el cuerpo, composiçión de todas las cosas que Dios crió.


Parte primera

En qué manera Dios crió el mundo
Dios, comienço non començado, crió el mundo en cuatro maneras, conviene saber: idealmente, materialmente, formalmente, ordinalmente. Digo lo primero, que crió Dios e formó el mundo idealmente, que impropriamente fablando quiere dezir por imaginaçión o semejança, porque antes que el mundo feziesse era en su deidat la imagen e figura del mundo con todas las cosas; et aquesto fue eternalmente en su deidat, ansí que su pensar non ovo començamiento.
Et si alguno dixiesse qué fazía Dios antes del mundo, dezirse ía que fazía el mundo en semejança, porque era en sí tal cosa apartada aquel pensamiento, que podía Dios d'él figurar et entallar aquello que Él quesiesse. E aquesto llamaron los griegos antiaros, que quiere dezir mundo en semejança. Et, por ende, dixo Aristótiles el mundo non ovo comienço, convién saber idealmente.
Lo segundo crió Dios el mundo materialmente, ca después que eternaliter lo imaginó, impropie fablando, fizo de nada una gran materia sin figura e semejança, a la cual llaman los griegos y1lé.
Lo terçero crió Dios el mundo formalmente, ca después que ovo fecho aquesta gran materia como le plogo púsolo en obra, segúnt su buen ordenamiento, e fízolo en seis días e al seteno folgó, non porque era cansado mas porque todas las cosas eran acabadas. E algunos dizen que ayuntadamente fizo Dios todas las cosas, segúnt aquel deár: «Qui creavit simul omnia», que quiere dezir «Él crió todas las cosas ayuntadamente». Et ansí paresçen estos dezires ser contrarios. A esto se puede responder que una cosa por diversas maneras considerada non trae contradiçión. Exemplo en la razón que fablamos; ca, si consideramos el mundo ser fecho formalmente o ordenadamente, en esta manera dezimos que fabló Moisén; si lo consideramos primera o segunda manera, de aquesto es la segunda auctoridat, e ansí la razón non es contra literal significaçión. Et si alguno dize pues que tal ordenança e regla era en todas las cosas e cuerpos celestiales la tierra era tal como agora, dezimos que non, por cuanto luego que crió Dios el mundo, segúnd dize el Maestro de las Istorias scolásticas ençima del Génesi, en el capítulo segundo, dize que la tierra era vana e vazía, ca era como abismo sin provecho e sin pareçer, e los griegos llamáronle caos. E, por ende, dixeron los judíos, ençima que aquella parte do dize «el Spíritu del Señor era ençima de las aguas», que estava ençima como faze la paloma sobre los huevos.
Et d'esto avemos que si preguntasse alguno en el comienço del mundo dó estavan los cuatro elementos, respondemos que do están agora, puesto que non de aquessa manera cuanto a los sus componimientos, ca el Señor en el sesto día adornó la tierra de animales e crió al omne a su semejança; en el quinto día fermoseó ell agua de peçes e el aire de aves; en el cuarto día fermoseó e compuso el fuego de strellas fixas e planetas, et, por ende, dize Moisén en el capítulo primero: «Sean fechas lumbrarias en el firmamento del çielo, porque se aparte el día de la noche e sean tiempos e años». De lo cual fablando el Maestro de las Istorias en el capítulo sesto dize: «El Spíritu Santo non tan solamente quiso que fuessen las estrellas e planetas por fermosura e luz, mas aón quiso que fuessen en señal de los buenos e malos temporales», que son conoçidos e departidos por los doze signos.
Et si alguno dize: pues pareçe que el omne e las bestias e animales non fueron fechos de los elementos; a esto dezimos que las estrellas ansí criadas, como fuessen de naturaleza de fuego, començaron de se mover e, andando, calentaron el aire e el aire calentó ell agua e dell agua la tierra, et dende fueron criados todos los animales por mezclamiento de los elementos.
Aquí puede alguno dezir por qué non fueron todos de una condiçión; dezimos que aquéllos que tomaron más del fuego e del aire fueron más ligeros, ansí como las aves, e aquéllas que tomaron más de fuego que de aire buelan más ligero, ansí como gavilán, arexaque o vençejo, e las otras que tomaron más de aire o de agua buelan más pesado, ansí como ánades o milanos, garças e otras semejantes. E de las otras que tomaron más del fuego fueron coléricos, ansí como el león, ligero e colérico; et los que tomaron más de la tierra son malencónicos, ansí como el buey e el asno; et los que tomaron del elemento del agua fueron fremáticos, ansí como los pesçes, speçialmente sin scama.
Et d'essa parte en la cual egualmente fueron igualmente convenidos los elementos fue fecho el omne. Et por esto dize Moisén en el primero capítulo: «Formó Dios el omne del limo de la tierra». Et de su costilla formó a Eva et fizo sus almas de nada. Et, por ende, si alguno preguntasse cuál cosa fizo Dios de mayor dignidat, responden los sabios que el omne, et esto por muchas razones speçialmente por dos: la primera, porque los elementos eran ya entre sí muy bien igualados e convenidos e los planetas fuera de los logares donde començaron a moverse, segúnd lo afirman todos los astrólogos que d'esto tratan; la segunda razón fue porque Dios fizo solamente al omne e todas las otras cosas mandó que fuessen fechas, ca çierto es que más es fazer la cosa que mandarla fazer. Et si alguno dize cuáles cosas durarán por siempre, dezimos que aquéllas que fueron fechas de nada, ansí como spíritus, ánimas, yllé, e todas las cosas otras se bolverán en aquello de que fueron compuestas. Testimonio es de Philósopho.
Et, por ende, el mal avrá fin e'l bien nunca fenesçerá. Et si alguno dize por qué el mal avrá fin e el bien non, dezimos que el mal falló el diablo e non porque lo fizo Dios, et por ende el mal es nada, ca todas las cosas que son sin Dios son nada, ca Dios non fizo el mal, maguer algunos piensan que sean dos naturas, una de bien e otra de mal, e que el bien fizo Dios e el mal el diablo, lo cual es falso porque el mal non es natura, maguer lo fallasse el diablo cuando pecó.
E que el mal non sea por natura puédese mostrar por razón, ca toda natura o es sin comienço o començada; si es sin començamiento, ansí es Dios, el cual non es començado, mas començante todas las cosas. Et si es començada, en dos maneras, ca o es perpetua o non; si es perpetua, ansí son las cosas criadas de nada, segúnt dicho es; si non es perpetuo duradera, ansí son todas las cosas resulubles. E como el mal non sea ninguna d'estas cosas, síguese que nada es. Ca si viene sobre la criatura buena, corrómpela en su nature propriedat; et cuando d'ella se parte queda la criatura sana. Otrosí, el mal non tiene logar çierto dó ansí como en su fin. Et si alguno dize que ansí es el bien, que non está en un lugar, mas en muchos, yo le diría que el bien solamente es en Dios por cençia e en las otras cosas por graçia. Et si alguno me argüisse que semejante el mal es el diablo, yo le diría, salva graçia, ca si el mal fuesse cençialmente en el diablo aquel mesmo instante que Dios criara al diablo, luego fuera en él el mal et, maguer pecara, non oviera pena, lo cual es falso.
Et por ende, de aquestas razones nasçen dos conclusiones: la primera es que usar bien es naturaleza; la segunda es que mal usar es contra naturaleza. Por que non se deve ninguno maravillar porque el mal es tanto reprehendido, ca non nada de la naturaleza tiene, sobre lo cual es fundada toda la sancta Scriptura. Et de aquí nasçe común dezir de los doctores, que más pesa un pecado mortal que todo el mundo.
Lo cuarto crió Dios el mundo poniendo orden en todas essas cosas que crió. Et aquesto fue cuando todo ya criado puso la natura de cada cosa sobre sí e estableçióles sus çiertos cuerpos e derechos, cómo deven engendrar, nasçer, cresçer e morir, segúnt fuerça, propriedat e natura de cada una d'ellas. Et ansí que toda la obra de generaçión e corruçión fue comendada desde comienço del mundo a la naturaleza, segúnt fundamento de philosofía. E para esto bien conosçer, fueron falladas las sçiençias liberales, sin las cuales ninguno por sotil que sea non puede aver conosçimiento de natura, ca si non avemos perfeto conosçer por las sçiençias de todas las cosas es por defecto de nuestro fraco juizio, mas non por defecto de arte, de lo cual dize el Philósofo en el segundo libro de Methaphísica: «Bien ansí como los ojos de la lechuza a la claridat del sol, bien ansí el nuestro entendimiento a todas las cosas que son muy çiertas en la naturaleza, ca, si bien non las entendemos, es por defecto nuestro e non de naturaleza, ca en todo es sin defecto alguno».

MERCURIO, VENUS Y MARTE EN LOS HORÓSCOPOS




Las características que confiere una influencia planetaria variaran dentro de unos patrones según su estado cosmico. No obstante cada uno de los planetas tiene una Naturaleza Esencial que le confiere un específico temperamento. Esta naturaleza puede expresarse de manera positiva o negativa. A continuación se indican estas características y analogías según algunos astrólogos destacados: Adolfo Weiss, LLewellyn George, Sepharial y Stephen Arroyo.






MERCURIO




Adolfo Weiss

En general:



Convertible, activo, nervioso, excitable y fecundo. Mercurio simboliza el intelecto puro, la lógica, el pensamiento disciplinado y ordenado; la firmeza, la perspicacia, el ingenio y el talento practico, comercial o diplomático.
En buen estado cosmico:


Concede a su influencia abundancia de ideas, habilidad, elocuencia, comprensión rápida y una memoria particularmente apta para los objetos concretos. Espíritu de investigación científica, prudencia y una razonable manera de vivir.
En mal estado cosmico:


Hace inestable, poco fidedigno, servil, despreciable, bajo, caprichoso, distraído, locuaz, rapaz, estafador, astuto, alevoso, infiel, malicioso, calumniador, olvidadizo y necio hasta la locura.


LLewellyn George
Dignificado:


Perceptivo, observador, intelectual, versátil, inteligente, hábil, vigilante, diestro, lucido, rápido, estudioso, capacidad de concentración, que posee buena capacidad mental y memoria.

Debilitado:


Descuidado, profuso, indeciso, imitador, vago, abúlico, vergonzoso, nervioso, inconstante, vulgar, informal, olvidadizo, falto de concentración, listo, maquiavélico, lleno de artimañas, mentiroso.

Sepharial


Analogías con el intelecto y su actividad; con la memoria.

Stephen Arroyo

Principios:

Comunicación; mente consciente (es decir mente lógica o racional)

Impulsos que representa:
Impulso a expresar las propias percepciones y la inteligencia por medio del lenguaje y la destreza.
Necesidades que simbolizan:


Necesidad de establecer contacto con los demás; necesidad de aprehender.
Expresión positiva:
Utilización creativa de la destreza o la inteligencia; razón y capacidad de discernimiento utilizadas para servir a altos ideales; habilidad para llegar a acuerdos mediante la comprensión objetiva y una clara expresión verbal.
Expresión negativa:

Mala utilización de la destreza y la inteligencia; amoralidad debida a una excesiva racionalización de todo; comunicación unilateral y terca.





VENUS




Adolfo Weiss

En general:



Magnética, templada, pasiva, afable y fecunda. La tradición atribuye a los individuos marcados por Venus las siguientes propiedades: unión por afinidad electiva, armonía, alegría, ternura, naturaleza conciliadora.
En buen estado cosmico



Venus confiere sus hijos gracia, sentido artístico y estético, intuición elevada y compasión, además de suerte en la vida sentimental.

En mal estado cosmico:



Hace perezoso, sensual, irreflexivo, torpe y desmañado en asuntos sentimentales,afecto a un ambiente inferior y a diversiones vulgares, falto de aprecio a si mismo y de buen gusto, incapaz de sentir el amor verdadero, entregado a los sentidos y, por tanto, libertino y voluptuoso, perverso, desordenado y negligente
.

LLewellyn George

Dignificado:



Afectivo, armonioso, contenta, graciosa, humana, refinada, compañera, artística.
Debilitado:

Inmodesta, emocional, indolente, gritona, que no piensa, extravagante, amante de
placeres.


Sepharial


Analogías:


con el dinero, aderezos, joyas, matrimonio y amor, diversiones, arte y relaciones con el otro sexo
.

Stephen Arroyo


Principios:


Gustos matizados por las emociones; valores; intercambio de energía con los demás entregándose y recibiendo; tendencia a compartir.

Impulsos que representa:



Impulso social y amoroso; Impulso a expresar los afectos; impulso a buscar placer



Necesidades que simboliza:


Necesidad de sentirse unido a otras personas. Necesidad de sentirse cómodo y en
armonía; necesidad de expresar las emociones.
Expresión positiva:


Amor; tendencia a dar y recibir, y a compartir; generosidad de espíritu.
Expresión negativa:


Autoindulgencia; codicia; exigencias emocionales; inhibición de afectos.




MARTE




Adolfo Weiss

En general:



Eléctrico, expansivo, destructivo, vigoroso y esteril. Los que están influidos por este planeta son naturalezas apasionadas, combativas, enteramente dinámicas,salvajes e indomables y adversas a toda obligación.
En buen estado cosmico:


Marca al individuo de su signatura como fuerte, temerario, combativo, confiado, generoso, rápido en la acción, desafecto a la servidumbre y a la injusticia.
En mal estado cosmico:



Hace vehemente, violento, iracundo, pendenciero, obstinado, precipitado, cruel, brutal, tiránico, desenfrenado y dispuesto a destruir, sin cuidarse de que los bienes que se destruyen sean ajenos o propios.

LLewellyn George

Dignificado:



Con coraje, aventurero, fuerte, agresivo, enérgico, activo, sin miedo, constructivo y apasionado.
Debilitado:


Violento, irritable, audaz, forzudo, impulsivo, impaciente, combativo, destructivo y sensual.


Sepharial

Analogías:



Con fuego, fiebre, demencia, luchas, ambición, anhelos, fuerza, energía, aventuras, veneno, lesiones por violencia, pasiones, muerte violenta.

Stephen Arroyo

Principios:



Deseo; voluntad encaminada hacia la acción; energía física; coraje.

Impulsos que representa:



Impulso hacia la autoafirmación y la agresividad; impulso sexual; impulso a actuar con firmeza.
Necesidades que simboliza:



Necesidad de lograr lo que se desea; necesidad de excitación física y sexual.
Expresión positiva:



Iniciativa; coraje; fuerza de voluntad dirigida conscientemente hacia un objeto valioso.
Expresión negativa:


Impaciencia; obstinación; violencia; uso inadecuado de la fuerza y amenazas.

JUPITER Y SATURNO EN LOS HOROSCOPOS





Las características que confiere una influencia planetaria variaran dentro de unos patrones según su estado cosmico. No obstante cada uno de los planetas tiene una Naturaleza Esencial que le confiere un específico temperamento. Esta naturaleza puede expresarse de manera positiva o negativa. A continuación se indican estas características y analogías según algunos astrólogos destacados: Adolfo Weiss, LLewellyn George, Sepharial y Stephen Arroyo.








JUPITER




Adolfo Weiss




En general:


Eléctrico, templado, vital, sanguíneo, y fecundo.


En buen estado cósmico:


Júpiter predispone al individuo de su signatura a ser filósofo, digno sabio, sincero sacerdote, fiel consejero de los poderosos. Concede grandeza de alma, ambición noble, lealtad, respeto a la ley razonable amor al prójimo, comprensión magnánima y amplia de los asuntos y actividades humanas.


En mal estado cósmico:


Equipa al hombre o a la mujer con las mismas características, pero en grado disminuido según sus relaciones con los demás planetas, que pueden llegar hasta la perversión de las mismas en casos de aspectos negativos. Entonces se presentan la superstición, la santurronería en lugar de la verdadera religiosidad y la arbitrariedad en lugar del carácter justiciero; la benevolencia no se origina en un altruismo profundamente arraigado., sino la vanidad y el deseo de "reclame"; donde debe prevalecer una liberalidad razonable, se pavonea un carácter despilfarrador y fanfarrón; la verdadera dignidad y la magnanimidad ceden su lugar a la simulación y la hipocresía.



LLewellyn George



Dignificado:


Benevolente, filántropo, generoso, verdadero, honesto, moral, sincero, caritativo, razonable, compasivo e imparcial.


Debilitado:


Prodigo, extravagante, pretensioso, hipócrita, injusto, deshonesto, artificial y déspota.




Sepharial


Analogías con sabiduría, religión, deber, asuntos jurídicos, el clero, piedad, abundancia, aumento, riqueza y buena suerte.







Stephen Arroyo





Principios: Expansión encanto.


Impulsos que representa: Impulso hacia un nuevo orden.


Necesidades que simbolizan: Necesidad de fe, verdad y confianza en la vida y en uno mismo; necesidad de mejorar.


Expresión positiva: Fe; confianza en un poder superior o en un plan mas vasto; apertura a la gracia; optimismo; necesidad de mejorar.


Expresión negativa: Excesiva confianza; pereza dispersión de la energía; tendencia a dejar el trabajo a los demás; irresponsabilidad; engreimiento; tendencia a hacer demasiadas promesas.




SATURNO



Adolfo Weiss




En general:


Magnético, nervioso, exigente, consolidativo y estéril. La influencia atribuida por la tradición a Saturno corresponde a una oposición a la vida, y a la vivacidad y una inclinación a la soledad, la concentración, la reflexión, la precaución, la paciencia, la lógica, la economía, la temperanza e incluso la aversión a toda expansión en el dominio de los placeres sociales y de la felicidad mundana.


En buen estado cósmico


Saturno concede al individuo de su signatura sentido justiciero, espíritu de investigación filosófica, metafísica y oculta, profundidad en los pensamientos, inclinaciones ascéticas, don de concentración y ascensión lenta pero sostenida.


En mal estado cósmico


lo hace frió, calculador, mezquino, dogmático, egoísta, temeroso, pesimista, totalmente escéptico e incrédulo, vengativo, codicioso, falaz, hipócrita e inclinado a una violencia que ultima a sus victimas con reflexión fría e inexorable.

LLewellyn George


Dignificado:


Prudente, contemplativo, prudente, responsable, preciso, perseverante, industrioso, paciente, económico, reservado, serio, resolutivo, considerado, matemático y ejecutivo.


Debilitado:


Escéptico, melancólico, incompetente, avaricioso, perverso, indiferente, laborioso, impotente, que gusta del secreto, sospechoso, miedoso, lento y pesimista.







Sepharial


Analogías con el padre, con enfermedad, afecciones crónicas, entorpecimientos, caídas, pobreza, oscuridad, decadencia, ruina, costumbres inveteradas, relaciones de larga duración.

Stephen Arroyo





Principios: Contracción y esfuerzo.


Impulsos que representan: Impulso a defender la estructura y la integridad del yo; impulso a la prudencia y a la seguridad a través de logros tangibles.


Necesidades que simbolizan: Necesidad de lograr la aceptación social; necesidad de confiar en los recursos y en el trabajo propios.


Expresión positiva: Esfuerzo disciplinado; aceptación de los deberes y las responsabilidades; paciencia; organización seguridad.


Expresión negativa: Auto limitación por confiar demasiado en las propias fuerzas y por falta de fe; rigidez; frialdad; actitud defensiva; inhibición incapacitadora, timidez; negatividad.

viernes, 24 de diciembre de 2010

URANO, NEPTUNO Y PLUTON EN LOS HOROSCOPOS

Las características que confiere una influencia planetaria variarán dentro de unos patrones según su estado cósmico. No obstante cada uno de los planetas tiene una Naturaleza Esencial que le confiere un específico temperamento. Esta naturaleza puede expresarse de manera positiva o negativa. A continuación se indican estas características y analogías según algunos astrólogos destacados: Adolfo Weiss, LLewellyn George, Sepharial y Stephen Arroyo.

URANO

Adolfo Weiss

En general:
Variable, excentrico, original, repentino, convulsivo y esteril Urano actua como energia abrupta, intermitente, en el sentido de lo imprevisto, lo repentino, lo sorprendente, lo extraño, lo incalculable. Es de naturaleza impulsivay explosiva, como una llama que asciende rapida y vertiginosamente hacia el cielo, pero que decae con la misma rapidez; o como una tremenda descarga electrica. Su caracteristica principal es el relajamientode lo denso, de la materia.
En buen estado cosmico
presta al individuo de su signatura un maximum de intuicion, ingeniosidad y genialidad.
En mal estado cosmico
provoca inclinacion a la vagancia, al desprecio de la tradicion, y de las costumbres, a la sublevacion y a la rebelion y a la extravagancia que llega a la perversidad.


LLewellyn George

Dignificado:
Original, inventivo, ingenioso, progresista, reformador, talento social, metafisico, unico, inconvencional, clarividente, magnetico, premonitorio y constructivo.
Debilitado:
Anormal, fantastico, extremo, excentrico, abrupto, repelente, erratico, grotesco, precipitado, prrematuro, destructivo y radical


Sepharial

Analogias
con catastrofes, sucesos y cambios repentinos, perdidas, suicidios, tragedias, asuntos romanticos.

Stephen Arroyo
Principios:
Libertad individualista; afirmacion del ego.Impulsos que representa: Impulso hacia la diferenciacion, la originalidad, y la independencia de la tradicion.
Necesidades que simboliza:
Necesidad de cambio, excitacion y expresion sin restricciones,
Expresion positiva:
Afinidad con la verdad; originalidad; inventiva; experimentacion directa, respeto por la libertad.
Expresion negativa:
Testarudez; inquieta impaciencia; necesidad constante de excitacion que lleva a realizar cambios sin ningun proposito definido ; rebelion; extremismo.



NEPTUNO
Adolfo Weiss
En general:
Magnetico, caotico, estetico, neurotico, falaz y esteril. En lo fisico-fisiologico Neptuno se muestra la mayoria de las veces, como nefasto., por prestar exceso de sensitividad y de susceptividad y tambien por excitar aberraciones mentales. Incluso aumenta la sensibilidad nerviosa que puede llegar hasta la neurosis.
En mal estado cosmico
produce el caos creativo y los tipos con aberraciones mentales o morales.


LLewellyn George
Dignificado:
Inspiracion y dotes psiquicas, idealista, capacidad psicometrica, impresionable, mistico, espiritu persceptivo, pooetico y musical.
Debilitado:
Vago, emotivo, indulgente, supersensible, soñador, vacilantey obsesivo.


Sepharial


Analogias
con sucesos secretos, fraude, emboscadas, vida nomada, muerte extraña, no natural, destierro y asociaciones secretas.

Stephen Arroyo
Principios:
Libertad trascendente, superacion del ego.Impulsos que representa: Impulso a escapar de las limitaciones del yo y del mundo material.
Necesidades que simboliza:
Necesidad de experimentar la unidad con la vida; una fusion completa con el todo.
Expresion positiva:
Afinidad con la totalidad; comprension de las dimensiones espirituales de la experiencia; compasion por todo el entorno; ideales.
Expresion negativa:
Escapismo autodestructivo;tendencia a eludir las responsabilidadesy a pasar por alto las necesidades del yo. rechazo a enfrentarse a las propias motivaciones y a comprometerse con nada.



PLUTON


Adolfo Weiss
En general:
Electrico, excesivo, abrumador, destructivo y esteril. Deduciones basadas en analogias tratan de explicarlo como octava superior del planeta Marte. Tanto por esta razon como,por experimentos del pendulo, y en ultimo termino tambien por los recuerdos escolares que despierta la denominacion mitologia del planeta, se pretende sea considerado como la monada , el origen de la vida, el puente entre el mas alla y este mundo , en una palabra , como el infierno con todas sus energias ansiosas de vida y conciencia, energias que en su insaciable afan anhelan la realidad de esta Tierra con una violencia desconsiderada y que destruye su fruto con dolores y convulsiones , aun cuando se desgarren las vias natales o se extermine la vida de la madre. Dado que las experiencias astrologicas con Pluton son escasas (su descubrimiento es del 21 de enero de 1930), cualquier interpretacion de este planeta debe tomarse con muchas precauciones y sentido critico.

LLewellyn George

Dignificado:
Consciente, puro, regenerador, liberador, justo, incorruptible.

Debilitado:
Destructivo, vicioso, sufriente, mortal y violento.


Stephen Arroyo
Principios;
Transformacion, transmutacion; eliminacion.Impulsos que representa: Impulso hacia un renacimiento total; impulso a penetrar en el centro de la experiencia.
Necesidades que simboliza:
Necesidad de pulir el yo; necesidad de prescindir de lo viejo a traves del dolor.
Expresion positiva:
Aceptcion de la necesidad de centrar la mente y la fuerza de voluntad en la propia transformacion; posesion del coraje necesariopara enfrentarse a los deseos y compulsiones mas profundos y para transformarlos mediante el esfuerzo y la intensidad de la experiencia.
Expresion negativa:
Expresion compulsiva de los deseos subconscientes, manipulacion intencionada de los demas para conseguir los propios fines; utilizacion despiadada de cualquier mediopara evitar el dolor de enfrentarsecon el propio yo; ambicion de poder.

lunes, 20 de diciembre de 2010

HELIO

Robert Graves: "Los mitos griegos"
Traductor: Luis Echávarri, revisión: Lucía Graves
b. Helio puede ver todo lo que sucede en la tierra, pero no es muy buen observador; en una ocasión ni siquiera advirtió el robo de su ganado sagrado por los compañeros de Odiseo. Tiene varios rebaños de ese ganado, cada uno de los cuales se compone de trescientas cincuenta cabezas. Los que están en Sicilia se hallan a cargo de sus hijas Faetusa y Lampecia, pero mantiene su rebaño mejor en la isla española de Eriteya[3]. Rodas es su dominio absoluto. Sucedió que cuando Zeus otorgaba islas y ciudades a los diversos dioses se olvidó de incluir a Helio entre ellos y exclamó: «¡Ay!, ahora tendré que comenzar todo de nuevo».
—No, señor —le replicó Helio cortésmente—, hoy he observado señales de una nueva isla que emerge del mar al sur del Asia Menor. Ya me contentaré con eso.

c. Zeus llamó a la parca Láquesis para que fuese testigo de que la nueva isla pertenecería a Helio
[4], y cuando Rodas emergió claramente de las aguas, Helio la reclamó y engendró allí siete hijos y una hija con la ninfa Rodo. Algunos dicen que Rodas existía antes de esa época y volvía a emerger de las aguas después de haber sido sumergida por el gran diluvio enviado por Zeus. Los telquines eran sus habitantes aborígenes y Posidón se enamoró de uno de ellos, la ninfa Halia, con quien engendró a Rodo y seis hijos. Esos seis hijos insultaron a Afrodita cuando pasó de Citera a Pafos, y ella hizo que enloquecieran; violaron a su madre y cometieron otros delitos tan detestables que Posidón los hundió bajo tierra y se convirtieron en los Demonios Orientales. Pero Halia se arrojó al mar y fue deificada como Leucótea, aunque la misma fábula se relata de Ino, madre del corintio Melicertes. Los telquines, previendo el diluvio, se alejaron por el mar en todas direcciones, especialmente con destino a Licia, y abandonaron sus derechos sobre Rodas. En consecuencia, la ninfa Rodo quedó como la única heredera y los siete hijos que tuvo con Helio gobernaron la isla después de su reaparición. Llegaron a ser astrónomos famosos y tenían una hermana llamada Electriona que murió virgen y ahora se le rinde culto como semidiosa. Uno de ellos, llamado Actis, fue desterrado por fratricidio y huyó a Egipto, donde fundó la ciudad de Heliópolis y fue el primero que enseñó a los egipcios la astrología, inspirado por su padre Helio. Los rodios construyeron entonces el Coloso, de setenta codos de altura, en su honor. Zeus agregó también a los dominios de Helio la nueva isla de Sicilia, que había sido un proyectil lanzado en la guerra con los gigantes.


En esta imagen, San Elias, una cristianizacion de Helio.
[1] Himno homérico a Helios 2 y 9-16; Himno homérico a Atenea 13; Hesíodo: Teogonía 371-4; Pausanias: v.25.5; Nono: Dionisíacas xii.l; Ovidio: Metamorfosis ii.l y ss. y 106 y ss.; Higinio: Fábula 183; Ateneo: vii.296.
[2] Apolodoro: ii.5.10; Ateneo: xi.39.
[3] Homero: Odisea xii.323 y 375; Apolodoro: i.6.1; Teócrito: Idilios xxv.130.
[4] Píndaro: Odas olímpicas vii.54 y ss.
[5] Escoliasta sobre Odas olímpicas de Píndaro vi.78; Tzetzes: Millares iv.137; Higinio: Fábulas 52, 152 y 154; Eurípides: Hipólito 737; Apolonio de Rodas: iv.598 y ss.; Luciano: Diálogos de los Dioses 25; Ovidio: Metamorfosis i.755 y ss.; Virgilio: Églogas vi.62; Diodoro Sículo: v.3; Apolodoro: i.4.5.

d. Una mañana Helio cedió a los ruegos de su hijo Faetonte quien le molestaba constantemente pidiéndole permiso para conducir el carro del Sol. Faetón le quería mostrar a sus hermanas Proto y Clímene que era un muchacho estupendo; y su cariñosa madre Rodo (cuyo nombre es inseguro porque se la ha llamado con los nombres de sus dos hijas y el de Rodo) le animó a hacerlo. Pero como no era lo bastante fuerte como para frenar la carrera de los caballos blancos que sus hermanas habían uncido al carro, Faetonte los condujo primeramente a tan gran altura sobre la tierra que todo el mundo se puso a temblar, y luego tan cerca de la tierra que abrasó los campos. Zeus, en un arrebato de ira, lo mató con un rayo y cayó en el río Po. A sus afligidas hermanas las transformó en álamos que se alzan en sus orillas y lloran lágrimas de ámbar; o, según dicen algunos, en alisos[5].

*

1. La subordinación del Sol a la Luna, hasta que Apolo usurpó el puesto de Helio e hizo de él una deidad intelectual, es una característica notable del mito griego primitivo. Helio no era ni siquiera un olímpico, sino un simple hijo de un Titán; y, aunque Zeus tomó luego ciertas características solares del dios hitita y corintio Tesup (véase 67.1) y de otros dioses orientales, éstas carecían de importancia en comparación con su dominio del trueno y el rayo. El número de animales vacunos de los rebaños de Helio —la Odisea lo llama Hiperión (véase 170.t)— es un recuerdo de la tutela que ejercía sobre él la Gran Diosa: era el número de días que abarcaban doce lunaciones completas, como en el año numano (Censorino: xx) menos los cinco días consagrados a Osiris. Isis. Set, Horus y Neftis. Es también un múltiplo de los números lunares cincuenta y siete. Las llamadas hijas de Helio son en realidad sacerdotisas de la Luna, pues las reses vacunas son animales lunares más bien que solares en el mito europeo primitivo; y la madre de Helio, la Eurifesia (véase p. 177) de los ojos de vaca, es la diosa Luna misma. La alegoría de un carro del sol que recorre el firmamento tiene carácter helénico, pero Nilsson, en su Primitive Time Reckoning (1920), ha demostrado que los cultos de los clanes ancestrales inclusive de la Grecia clásica, se regulaban por la luna únicamente, lo mismo que la economía agrícola de la Beocia de Hesíodo. Un anillo de oro de Tirinto y otro de la Acrópolis de Micenas prueban que la diosa gobernaba tanto a la luna como al sol, que aparecen colocados sobre su cabeza.
2. En la fábula de Faetonte, que es otro nombre de Helio (Homero: Ilíada xi.735 y Odisea v.479), se ha injertado una fábula instructiva sobre la alegoría del carro, y la moraleja es que los padres no deben echar a perder a sus hijos atendiendo los consejos femeninos. Esta fábula, sin embargo, no es tan simple como parece: tiene una importancia mítica en su referencia al sacrificio anual de un príncipe real, en el único día calculado como perteneciente al año terrestre y no al sideral, a saber el que seguía al día más corto. El rey sagrado simulaba morir a la puesta del sol; al muchacho interrex se le investía inmediatamente con sus títulos, dignidades e implementos sagrados, se casaba con la reina y le mataban veinticuatro horas después; en Tracia le despedazaban mujeres disfrazadas de caballos (véase 27.d y 130.1), pero en Corinto y en otras partes era arrastrado por un carro del sol tirado por caballos enloquecidos, hasta que moría deshecho. Inmediatamente el viejo rey salía de la tumba donde había estado oculto (véase 41.1) como sucesor del muchacho. Los mitos de Glauco (véase 71.a), Pélope (véase 109.j) e Hipólito («estampida de caballos»; véase 101.g), se refieren a esta costumbre, que parece haber sido llevada a Babilonia por los hititas.


3. Los álamos negros estaban consagrados a Hécate, pero los blancos prometían la resurrección (véase 31.5 y 134.f); por lo tanto, la transformación de las hermanas de Faetonte en álamos indica una isla sepulcral donde un colegio de sacerdotisas oficiaba en el oráculo del rey tribal. El que se dijera que se habían transformado también en alisos apoya esta opinión, pues los alisos bordeaban la Eea («lamento») de Circe, isla sepulcral situada en la parte superior del Adriático, no lejos de la desembocadura del Po (Hornero: Odisea v. 64 y 239). Los alisos estaban consagrados a Foroneo, el héroe oracular e inventor del fuego (véase 57.1). El valle del Po era el término meridional de la ruta de la Edad de Bronce por la que se llevaba el ámbar, consagrado al Sol, desde el Baldeo hasta el Mediterráneo (véase 148.9).
4. Rodas era propiedad de la diosa Luna Dánae —llamada Camíro, Yálisa y Linda (véase 60.2)— hasta que fue expulsada por el dios Sol hitita Tesup, adorado como toro (véase 93.1).A Dánae se la puede identificar con Halla («del mar»), Leucótea («diosa blanca») y Electriona («ámbar»). Los seis hijos y una hija de Posidón y los siete hijos de Helio indican una semana de siete días regida por potencias planetarias, o Titanes (véase 1.3). Actis no fundó Heliópolis —Onn o Aunis—, una de las ciudades más antiguas de Egipto; y la pretensión de que enseñó a los egipcios la astrología es ridícula. Pero después de la guerra de Troya los rodios fueron durante un tiempo los únicos mercaderes marítimos reconocidos por los Faraones y parecen haber tenido antiguos vínculos religiosos con Heliópolis, el centro del culto de Ra. El «Zeus hieropolitano», que tiene bustos de las siete potencias planetarias como ornamentos frontales, puede ser de inspiración rodia, como estatuas análogas encontradas en Tortosa, España, y en Biblos, Fenicia (véase 1.4).